“La OMS acaba de admitir que tenía razón. Las cuarentenas están matando a países de todo el mundo. La cura no puede ser peor que el problema en sí mismo. Abran sus estados, gobernadores demócratas. Abre Nueva York. Una larga batalla, ¡pero finalmente hicieron lo correcto!”, twitteó triunfante Trump. Sucede que la burocrática OMS se desdijo de su prédica pro cuarentena, y ahora, ¡falta que afirme que los barbijos solo dificultan la respiración!