Se trata de XM Cyber, fundada por el exdirector de la agencia de inteligencia israelí Tamir Pardo, y de Sixgill, creada por Avi Kasztan y Elad Lavi, ambos vinculados con el desarrollo de tecnologías para las Fuerzas de Defensa de Israel. “La UE debe suspender su relación con compañías y personajes que o han violado o ayudan a violar los derechos humanos del pueblo palestino. Máxime, cuando la amenaza de anexión sigue vigente. El proyecto Horizonte 2020 no puede servir para promover las actividades de estas empresas y enriquecer a sus creadores”, dice Manu Pineda.