Dos científicos climáticos reconocidos han advertido que la agenda verde promovida por el Foro Económico Mundial y otros globalistas es un engaño. Argumentan que las regulaciones propuestas por la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos no se basan en hechos científicos, sino en opiniones políticas y modelos especulativos incorrectos. Estos expertos han señalado que los modelos climáticos han fallado consistentemente en predecir resultados reales y que el riesgo de un calentamiento catastrófico causado por los combustibles fósiles es inexistente según el método científico.