Disney está generando controversia con su nueva serie "Pauline", en la que una adolescente queda embarazada después de una aventura con Satanás. Además, el programa promueve preocupación por la crisis climática. Esto ha llevado a la pérdida de millones de suscriptores y críticas por parte de padres preocupados. Parece que Disney no ha aprendido de sus errores y continúa promoviendo contenido inapropiado para los niños.