Según la Bundeskriminalamt (BKA), la inmigración masiva a Alemania está contribuyendo significativamente al aumento de los delitos violentos denunciados en todo el país. Las estadísticas policiales publicadas el jueves revelaron un incremento considerable de aproximadamente el 17 por ciento en los delitos violentos durante el primer semestre de 2023 en comparación con el mismo período del año anterior.
Según la BKA, hubo un aumento del 14 por ciento en los delitos violentos en público y aproximadamente un 3 por ciento en los informes de delitos violentos en residencias privadas. La agencia identificó tres factores principales que contribuyeron a este preocupante incremento en los delitos: el aumento de la movilidad después de los cierres, la crisis del costo de vida y la inmigración masiva.
"Crear más oportunidades y razones para la delincuencia", señaló, fue el resultado de la movilidad que había regresado a los niveles anteriores a la pandemia. Además, afirmó que el número de delitos violentos se correlaciona con las cargas económicas causadas por la alta inflación, especialmente en las "regiones económicamente más débiles".
La "alta tasa de inmigración" de Alemania fue citada como el tercer factor. De acuerdo con la BKA, "hay un mayor aumento en el número de sospechosos no alemanes cuando se trata de delitos violentos". Se puede asumir que aquellos que buscan protección tienen varios factores de riesgo que incrementan la probabilidad de cometer delitos violentos. Estos factores incluyen la situación de vida en los centros de recepción inicial, así como la inseguridad económica y las experiencias de violencia.
En comparación con los sospechosos no alemanes, que aumentaron hasta en un 23 por ciento, el número de delitos que involucran a ciudadanos alemanes, incluyendo a aquellos con doble nacionalidad que pueden haber nacido en otro lugar, experimentó un aumento del 8 por ciento. Además, se observó un incremento significativo del 37 por ciento en los casos de menores extranjeros.
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