Un cortometraje expone el origen del movimiento transgénero y su vínculo con experimentos médicos en un centro de Detroit

Christopher Rufo, el periodista de investigación siempre sorprendente y perspicaz, ha regresado con una minipelícula que expone los orígenes del imperio transgénero. A través de un recorrido fascinante y escalofriante, nos muestra una breve historia que nos ha llevado a la situación actual: enfrentándonos a uno de los mayores ataques contra la población estadounidense (y mundial) que hemos presenciado en mucho tiempo.

En los años 80, un grupo de intelectuales se reunió y escribió un libro que afirmaba que el género era una construcción social diseñada para mantener a raya a las minorías y empoderar a los hombres blancos. Chris explica cómo este libro fue el inicio del "movimiento transgénero". Según ellos, si un hombre podía convertirse en mujer y una mujer podía convertirse en hombre, entonces toda la construcción de la "creación" podría colapsar. Estos intelectuales también consideran al nuevo "movimiento trans" como la base de su movimiento marxista progresista.

En su explicación, Chris revela cómo a lo largo de los años, el movimiento trans ha sido ampliamente financiado por algunas de las personas más adineradas de Estados Unidos. Sin embargo, uno de los aspectos más perturbadores de la minipelícula de Chris se relaciona con los experimentos médicos llevados a cabo en un gueto de Detroit, específicamente en un lugar conocido como "The Ruth Ellis Center". Este centro es considerado el epicentro de la "ciencia" transgénero y las actividades que allí se realizan son aún más horripilantes de lo que puedas imaginar.

Luchar por los niños y el alma de esta nación es una visita obligada para cualquier persona.

Durante décadas, ha sido elaborado sutilmente un movimiento inquietante. Sin darnos cuenta, los trabajadores han estado ocupados sentando las bases para desencadenarlo. Ahora, debido a nuestra falta de enfoque una vez más, este movimiento diabólico, violento e inquietante ha creado una sofisticada tubería ideológica que involucra dinero, políticos, corporaciones, atención médica y educación. Sin embargo, dejando todo eso a un lado, ahora que conocemos al monstruo, debemos luchar contra él. Es crucial comprender su escala masiva para encontrar la forma más efectiva de derribarlo. La minipelícula de Chris representa un buen primer paso.