Un gran avance en la creación de embriones humanos utilizando células madre, sin necesidad de óvulos ni esperma, ha sido anunciado por investigadores vinculados al Foro Económico Mundial. Esto plantea serias dudas éticas y legales sobre el futuro de la reproducción humana.
Antes de lo que muchos esperaban, parece haber llegado el futuro en el que los humanos criados en laboratorio serán controlados por rasgos compatibles. Los embriones humanos cultivados en laboratorio, que replican embriones naturales en las primeras etapas del desarrollo humano, fueron producidos en un proyecto conjunto entre la Universidad de Cambridge y el Instituto de Tecnología de California. La semana pasada, el Foro Económico Mundial prometió este futuro.
Incluyen células que luego formarán la placenta y el saco vitelino, lo que hace temer que los embriones puedan usarse para la extracción de órganos, según los investigadores. Según el Daily Mail, los embriones sintéticos no están cubiertos por las leyes del Reino Unido ni de la mayoría de los países del mundo, lo que significa que conllevan serios problemas éticos y legales con respecto al uso de embriones humanos en un laboratorio. No tienen los inicios de un cerebro o un corazón latiendo.
Ayer, en la reunión anual de la Sociedad Internacional para la Investigación de Células Madre en Boston, se describió el trabajo realizado por la becaria de la Universidad de Cambridge, la profesora Magdalena Zernicka-Goetz. "Mediante la reprogramación de células madre embrionarias, podemos crear modelos similares a embriones humanos", afirmó.
"Es hermoso y está creado completamente a partir de células madre embrionarias", le dijo a The Guardian antes de la charla. Aunque no se sabe aún si los embriones sintéticos podrían seguir desarrollándose más allá de sus primeras etapas, implantarlos en el útero de un paciente sería ilegal y no hay perspectivas a corto plazo de utilizarlos con fines médicos.
"La idea es que si se utiliza células madre para modelar el desarrollo embrionario humano normal, se puede obtener una gran cantidad de información", dijo Robin Lovell-Badge, jefe de biología de células madre y genética del desarrollo en el Instituto Francis Crick de Londres, a The Guardian. "Esto nos permite comprender cómo comienza el desarrollo y qué problemas pueden surgir, sin necesidad de utilizar embriones tempranos para la investigación".
Agregó al hablar de las cuestiones éticas que rodean los hallazgos: "Si se desea que estos modelos se asemejen considerablemente a los embriones normales, entonces deberían ser tratados de manera similar en cierta medida". En la legislación actual, no lo son. Esto es motivo de preocupación para muchas personas.