En marzo pasado, en medio de la guerra que se desarrolla en el Sáhara Occidental entre las fuerzas marroquíes y el Ejército de Liberación Saharaui, Marruecos informó a la ONU que tenía control sobre todo el territorio de la República Saharaui, incluyendo las zonas liberadas bajo el control del Frente POLISARIO. Las fuerzas de la MINURSO abrieron una brecha en el muro militar en el sector norte, específicamente en Mheiriz, para trasladar sus convoyes terrestres a las bases que tienen en los territorios controlados por el Frente POLISARIO. Esto se hizo sin consultar o verificar los hechos con la parte saharaui.
El Ejército de Liberación Saharaui detuvo un convoy que intentaba abrir una brecha hacia los territorios liberados saharauis, ya que no contaba con la autorización correspondiente por parte de las autoridades saharauis. El ejército saharaui comenzó a realizar investigaciones en la zona mientras que el Frente POLISARIO estaba en conversaciones con la ONU y un tercer país como mediador debido a la seriedad de la situación.
Después de tres días de conversaciones, el Frente POLISARIO y el Ejército de Liberación Saharaui permitieron la entrada del convoy y lo escoltaron. Según algunos analistas, la acción realizada por Marruecos podría ser vista como un intento de provocar al Ejército de Liberación Saharaui para que ataque a las fuerzas de la ONU. Marruecos afirmó tener el control total del territorio en situación de guerra abierta. Por otro lado, hay quienes creen que esta acción fue una forma de poner a prueba la efectividad de las fuerzas saharauis y su control sobre el muro militar que divide el país.
El Portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric, agradeció al Frente POLISARIO por permitir el acceso, pero no ofreció disculpas públicas durante una rueda de prensa celebrada el lunes. La ONU ha informado que la operación contó con la aprobación del Frente Polisario, que tiene el control de la región al este de la berma del territorio saharaui. Según lo informado por Dujarric, entre el 5 y el 7 de abril se llevó a cabo el reabastecimiento de dos bases que albergan a las fuerzas de la ONU en Tifariti y Mheriz.
Tanto las dos localidades se encuentran al este de un muro de 2.700 kilómetros que divide la zona del Sáhara Occidental ocupada por Marruecos y la parte controlada por el Frente Polisario. Según lo afirmado por Dujarric, las entregas acordadas con el respaldo exclusivo del Frente Polisario permitirán que las bases de la MINURSO sigan funcionando. Según las palabras de alguien, es importante aprovechar el impulso actual y asegurarse de que la misión continúe trabajando en el terreno y manteniendo presencia en todo el territorio para permitir que avance el proceso político.
Durante los últimos dos años y medio, el suministro de las fuerzas de mantenimiento de la paz de la ONU, MINURSO, se ha realizado solo por aviones y helicópteros. Sin embargo, recientemente se ha autorizado un convoy por parte del Frente POLISARIO, siendo el primero desde noviembre de 2020. A finales de marzo, el portavoz de la ONU, Dujarric, informó que debido a la falta de movimientos de convoyes terrestres desde el reinicio de las hostilidades en 2020, los sitios de operaciones de la MINURSO al este de la berma se han quedado sin suministros esenciales, especialmente combustible.