Alberto Núñez Feijóo afea que los fondos europeos han dejado fuera las redes de distribución que suponen más de 2.000 concesionarios que generan 153.000 puestos de trabajo.
A su vez, denuncia que el Perte ha sido un fracaso que no ha contado con las empresas y ha generado una situación de incertidumbre.
Por otro lado, lamenta que España cierre 2022 en el vagón de cola de la electrificación de toda Europa, con menos de la mitad de puntos de recarga de automóviles y unas previsiones para final de 2023 que no se van a cumplir, ya que debería haber 70.000 puntos y 250.000 vehículos eléctricos.
"Líder en lemas pero a la cola de la recuperación"
Critica a un Gobierno que hace a España “líder en lemas”, pero mantiene al país a la cola de la recuperación: “Ni hemos salido más fuertes, ni hemos sido capaces de que nadie se quede atrás; de hecho, España y la mayoría de las familias se han quedado atrás”.
Enumera los datos de una realidad económica que “no invita al triunfalismo”: España es el último país de la UE en recuperar el PIB prepandemia, líder en paro y en deuda, con la inflación subyacente más alta desde 1986; el país que más fondos europeos recibe, pero que no llegan a la economía real; el que más renta disponible ha perdido de la OCDE y con 13 millones de españoles en riesgo de pobreza.
Se declara a favor de la transición energética y ecológica, pero denuncia la “revolución abrupta” del Gobierno, que pone en riesgo al tejido productivo y perjudica a empresas y familias.
Por último, considera un “enorme cinismo” que España haya incrementado en plena invasión de Ucrania las importaciones de gas a Rusia, representando hasta el 20% del total: “Mientras regalamos carros de combate a Ucrania, estamos comprando el gas a Rusia”.
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