Seguimos recordando, es útil para todos
lunes 11 de julio de 2022, 09:19h
En estas fechas, nuestra sociedad y nuestros conciudadanos tienen otra oportunidad para recordar, para ejercitar esa memoria, que consiste en rememorar tiempos pasados, para traerlos a nuestra consideración, y aprender de lo bueno y huir de lo malo, para que nuestra sociedad no vuelva a caer en errores trágicos. Hechos pasados que citan los que los vivieron, y aportan datos documentales o testimoniales de aquello, para que en ejercicio de la verdad no se engañe al ciudadano, no se le dé una impresión distinta de la realidad que le lleve a equivocarse de nuevo como se pretende en la actualidad por los que dicen que nos gobiernan, y que pretenden reescribir la historia a su antojo y capricho.
Hace pocos días celebrábamos la noticia feliz del aniversario de la liberación por la Guardia Civil y el Juzgado de la Audiencia Nacional, de Jose Ortega Lara, la persona que mas tiempo ha permanecido secuestrada, a la que en definitiva y eso es lo importante le han arrebatado su libertad de movimientos, vida familiar, etc. una banda de malhechores asesinos que se hacía llamar ETA.
Aunque tal hecho carece de posible justificación real, es lo cierto que aquellos que se irrogan el adjetivo de revolucionarios de izquierdas, aunque ni son lo uno ni son lo otro, lo justificaban, ya que siempre hallan una justificación para todo, aunque sea injustificable, en la pretensión de obtener el cese de la dispersión de los presos de la banda asesina, pero eso era nada más que una justificación rebuscada, ya que existían cauces democráticos para su petición máxime estando el PNV en el Parlamento. Los que teníamos acceso por razón de nuestra profesión, y conocimiento a través de actuaciones declaradas públicas, de la realidad, sabíamos que lo que se pretendía por los asesinos era una demostración de fuerza ante el Estado, para imponer su criterio, no en el tema de la dispersión sino en muchas cosas y sobre todas poder decir que habían ganado la guerra.
Razón de fuerza y de venganza, realmente, ya que, ante la liberación de Ortega, pocos días después, secuestraron a un concejal del PP del Ayuntamiento de Ermua, llamado Miguel Ángel Blanco, y posteriormente el “valiente gudari de pacotilla con pistola”, le dio dos tiros en la cabeza acabando con su vida, Miguel Ángel Blanco estaba maniatado e inmovilizado para evitar que pudiera defenderse. Eta se encontraba, con que su activo criminal más importante, el secuestro de Ortega había fracasado estrepitosamente, necesitaba, ante los suyos y ante los demás, mostrar su fuerza vengándose del partido del Gobierno, de entonces al que pertenecía Miguel Ángel Blanco y de los ciudadanos. No se trataba de amparar una petición igual o similar a la citada en el anterior secuestro, se trataba de mostrar a la ciudadanía, como mafia que son, que ellos se vengaban del que les había ganado la partida como represalia por su victoria. Fue un acto de venganza, como al fin se ha puesto de manifiesto por los medios en esta ocasión. No existía otra razón mas que el vengarse de los españoles.
Ya he dicho que por razón de mi trabajo, tenía acceso a documentación que figuraba en un procedimiento de petición de permiso, la que se hizo pública con la resolución del caso, y tal venganza, no la decía yo, sino uno de los miembros mas relevantes de la banda etarra, como era Urrusolo Sistiaga, que nos dio traslado de la carta que había remitido a la dirección de la banda criminal a la que pertenecía, en la que se indicaba, que el asesinato era un error que podría ser histórico y que ya era hora de dejar de matar. Lo dijo él, como he indicado, sin que conste presión oficial o judicial alguna, ya que era de fecha anterior al tramite del permiso que solicitaba. Esta conclusión la reitero en una entrevista que hizo en la SER durante uno de los permisos.
Se trataba de un acto mafioso de venganza, no se pretendía reivindicar derecho alguno, ni libertad del pueblo vasco, ni resta
blecimiento de fuero o lengua. Era simplemente un acto de venganza, y como tal debe ser recordado, se le mato para pretender compensar la derrota de la liberación de Ortega Lara.
Esa ha sido y es la política de la banda, que repite que esta disuelta, pero no es cierto, ya que son muchos los homenajes y actos en los que su convocatoria, realizada por quien sea, Bildu, Sortu, o quien sea, no sirva más que para solapar una actuación de los asesinos.
Ahora ante la terrible debilidad y “tontería” por no llamarle como se merece, del Gobierno del inquilino de la Moncloa, apoyado por el nefasto zapatito, se está facilitando a los asesinos su acercamiento a cárceles del País Vasco, sin nada a cambio, perdonando muchísimos años de condena, y sin que se pronuncien siquiera de forma mentirosa, dada la carta fotocopiada que presentaron algunos, pidiendo perdón a las víctimas. Y nuevamente cabe preguntarnos, a cambio de qué, de que el citado inquilino obtenga una mayoría ficticia y forzada ilícitamente en el Parlamento para seguir con el Falcon y la Mareta o Doñana, y aunque lo solapen bajo un apoyo a presupuestos, sabemos que al País Vasco los presupuestos le dan lo mismo, dado el cupo vasco de tributación. Todo es mentira en esta gente sin vergüenza ni dignidad, a pesar de que no falta algún palmero, como el zapatitos, que hace pocos días decía que el Gobierno lo esta haciendo muy bien. Falto que este o ambos, oyeran el comentario mayoritario del pueblo español, que como Don Juan Carlos le dijo al tirano asesino de Hugo Chaves “por qué no te callas”.
Mentira tras mentira pretenden hacer una historia nueva para nuestros hijos o nietos, menos mal que el suspenso académico en historia no cuenta, por lo que entendí hace tiempo que los que vivimos aquello debemos contarlo, y luego cada uno que lo interprete a su manera.
No falta en el caso una mención a los podemitas, que dicen que van a retirar el apoyo al inquilino monclovita si no retira el importe de ayuda a la OTAN, eso es postureo, figureo y mentira. Los podemitas no se van del gobierno ni con agua caliente, cabe preguntarse, si salen del gobierno, a donde van, a ser cajera de super como la galapaguina. No se lo creen ni ellos, pero le sirve al de la Moncloa para tapar sus vergüenzas, pero ya son tantas que ni así las tapa todas.
Una ultima vivencia. Hace años, en conversación con un compañero de profesión y amigo, hoy abogado de fama internacional, ante los comentarios que hacia sobre varias cosas, le dije una cosa que aprendí de uno de mi pueblo, gente sabia que camina despacio bajo una boina. Por mucho que manipuléis, el telegrama del cuartel General de Burgos de 1 de abril de 1.939 dice lo que dice, y eso no se le puede dar otro texto.
Basta ya de mentiras sobre la banda asesina de ETA, sigue latente y aunque no mata, presiona y coacciona y alguna otra cosa más, que solo el temor de la ciudadanía vasca silencia. No nos dejemos manipular y hay que llamar lo que se merece a lo que es.