Antiguos miembros de PSOE, Cs y UPyD lanzan Consenso y Regeneración

Se trata de una red "independiente y transversal", con la Fundación Joan Bosca como artífice, que congrega a conocidos políticos como el socialista Nicolás Redondo Terreros; Ignacio Prendes, Toni Roldán o Francesc de Carreras, de Ciudadanos, o Gorka Maneiro, Beatriz Becerra, Francisco Sosa Wagner o Fernando Savater, de UPyD.

Pero no son los únicos rostros populares. La jurista Elisa de la Nuez, el director de cine Iñaki Arteta, el empresario Joaquín Tamames, el diplomático Eduardo López Dóriga o familiares de víctimas socialistas de ETA como José María Múgica o Mikel Buesa, también forman parte de Consenso y Regeneración.

Ante el "declive" de España, la plataforma cree necesaria una "regeneración de fondo" encabezada por la sociedad civil. Consenso y Regeneración considera que la actual situación del país nos lleva a "un problema internacional de reputación" donde se han despertado "viejos y falsos fantasmas del pasado".

En su manifiesto advierten sobre la necesidad de "unir esfuerzos y sacrificios" en torno a "un gran consenso" que deben liderar los actuales líderes políticos, y defienden además que España necesita crear empleo "estable" y "de calidad", lo que pasa por potenciar la investigación, la tecnología, infraestructuras y la "excelencia" del sistema educativo.

"Los que denigran la Transición y niegan legitimidad a la Constitución del 78 no tienen más pretensión que debilitar al Estado, bien para facilitar la independencia de sus distintos territorios o bien para implantar modelos dudosamente democráticos", apuntan. Y es que defienden la Monarquía parlamentaria como "un pilar fundamental" del sistema democrático español, un "nexo de unión" entre todos los ciudadanos.

La plataforma reivindica también la Carta Magna del 78, aunque "ha llegado el momento de la regeneración del sistema y de las reformas en muchos ámbitos", deben abordarse "desde el máximo consenso político y social, no haciendo tabla rasa de todo lo conseguido y asentado durante las cuatro últimas décadas".

"Los españoles podemos dar y recibir con el máximo orgullo el legado histórico de nuestros padres porque ningún error del pasado debe borrar nuestros méritos y aciertos, ni justificar la impugnación del periodo más próspero de nuestra historia", concluyen.