La presidenta del partido naranja mantiene “la mano tendida para salvar vidas y empleos” pero “implacable cuando se intentan destruir valores”. “Si Sánchez quiere nuestro apoyo tiene que haber unos presupuestos mejores desde el punto de vista económico y eliminar la cacicada de la Ley Celaá”.
En esta misma línea, Arrimadas ha resumido las nuevas líneas naranjas “en dos bloques”: “Un primer bloque económico de ayudas a las pymes, trabajadores y autónomos; si tenemos restricciones muy fuertes, hay que inyectar en la economía ayudas directas, será la única forma de que aguanten las empresas, pymes y autónomos”. Y añade que “la conciliación será un requisito importante, para ello pedimos un permiso retribuido a los padres que tienen que hacer cuarentena”.
Arrimadas ha hablado de un “segundo ámbito” para “la igualdad de los españoles y el freno a las cacicadas separatistas”: “Pedimos que pongan por escrito que no habrá un referéndum de independencia y que no tachen la lengua oficial de su país de la ley de educación, cosas que aquí parecen extraordinarias y son lo más lógico”, ha espetado.
Por su parte, el eurodiputado Jordi Cañas ha destacado la “necesidad de que estos PGE cuenten con el aval de Europa”. “Estarían muy reforzados por una comisión donde los liberales son claves, el apoyo de Cs podría reforzar la credibilidad de estos presupuestos, y significaría también un refuerzo de sensatez no solo para el Gobierno, también para España”. Cañas ha comparado además “el auge de los nacionalismos” con “un virus al que aislar y derrotar”, “porque si no se aísla se contagia”, a lo que Arrimadas ha añadido que “el nacionalismo catalán ha sido determinante en muchos momentos para negociar presupuestos y leyes, pero nunca han pedido cosas para los catalanes, sino para sus partidos y las elites nacionalistas”, ha concluido.