El Gobierno de Colombia ha anunciado su decisión de otorgar asilo a los opositores ecuatorianos que busquen refugio en su territorio, tras el reciente proceso electoral en Ecuador. En estas elecciones, el presidente Daniel Noboa fue reelegido, aunque su triunfo ha sido objeto de acusaciones de fraude por parte de la candidata opositora Luisa González.
Esta declaración fue realizada por el presidente colombiano, Gustavo Petro, quien comunicó a través de su cuenta de X que existe una lista negra de opositores en Ecuador que están siendo perseguidos. Ante esta situación, Petro ha decidido recibir a estos individuos como asilados en Colombia.
Detenciones y denuncias
Además, el mandatario colombiano denunció que han sido detenidos observadores electorales provenientes de Colombia, aunque no proporcionó detalles adicionales sobre este asunto.
Petro también hizo referencia a una interacción con la Internacional Progresista donde se adjunta una lista que incluye a figuras de la oposición que corren un alto riesgo de ser arrestadas. Este documento supuestamente habría sido elaborado por la administración del reelecto Noboa.
Entre los nombres mencionados se encuentra Luisa González, quien sostiene que los resultados electorales fueron fraudulentos. También figura Verónica Abad, actual vicepresidenta, cuyos derechos políticos están suspendidos en medio de una disputa con su anterior compañero de fórmula.
Reacciones internacionales
En otras reacciones relacionadas con la situación política en Ecuador, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, declaró que su país no restablecerá relaciones diplomáticas con Ecuador mientras Noboa esté en el poder y calificó su victoria como «dudosa».
Por otro lado, el presidente venezolano Nicolás Maduro responsabilizó a una ONG venezolana dirigida por la opositora María Corina Machado y al gobierno de Estados Unidos por lo que considera un «fraude» electoral en Ecuador.
Asimismo, la Organización de Estados Americanos (OEA), a través de su Misión de Observación Electoral, expresó su preocupación al señalar que el proceso electoral estuvo marcado por condiciones desiguales durante la campaña y evidencias del uso indebido de recursos públicos para fines proselitistas.