En los Países Bajos, el año 2024 marcó un hito inquietante en la historia de la eutanasia: casi 10,000 personas, incluyendo a individuos con problemas de alcoholismo y aquellos que enfrentan la depresión, fueron sometidos a este procedimiento. Este registro histórico ha intensificado el debate global sobre la muerte asistida.
De acuerdo con un informe de Bruno Waterfield publicado en The Times el 24 de marzo de 2025, se registraron 9,958 muertes por eutanasia en el país durante el año pasado, lo que representa un incremento del 10% respecto a las 9,068 muertes reportadas en 2023. Este aumento del 88% desde 2014 refleja una tendencia alarmante hacia la normalización de esta práctica en una nación donde terminar con la vida se está convirtiendo en una opción cada vez más común.
Un panorama preocupante
Los datos revelados son aún más perturbadores. Waterfield indica que 219 de estas muertes se debieron exclusivamente a razones psiquiátricas, un aumento significativo desde las 138 registradas en 2023 y las apenas 88 en 2020. Esto representa un incremento del 59% en solo un año y un asombroso aumento del 250% en cuatro años. La creciente inclusión de jóvenes con problemas mentales entre los casos de eutanasia ha encendido alarmas a nivel mundial. La experiencia de los Países Bajos sirve como advertencia: extender la eutanasia a casos psiquiátricos abre una puerta difícil de cerrar.
Theo Boer, profesor de ética en salud y exmiembro del comité de supervisión de eutanasia en los Países Bajos, no escatima palabras al abordar esta problemática. En un artículo contundente para Le Monde el 8 de abril de 2025, instó a Francia y al resto del mundo a observar detenidamente lo que ocurre en Holanda y reconsiderar sus enfoques sobre este tema.
Crecimiento alarmante
Boer señala que no solo está aumentando el número total de muertes por eutanasia; también se están transformando las circunstancias bajo las cuales se llevan a cabo. La proporción de muertes por eutanasia creció del 5.4% en 2023 al 5.8% en 2024, con algunas regiones alcanzando cifras cercanas al 15% desde hace años. Esta situación sugiere que la eutanasia ya no es considerada una última opción, sino una alternativa viable para muchos.
Aún más inquietante es el fenómeno conocido como "eutanasia conjunta", donde parejas o hermanos optan por morir juntos; este tipo específico aumentó un notable 64% en 2024, alcanzando un total de 108 muertes. Mientras tanto, los casos psiquiátricos continúan aumentando y las solicitudes relacionadas con demencias también están creciendo rápidamente.
Reflexiones finales
Boer advierte que esta tendencia no es simplemente una fluctuación temporal; es un cambio estructural profundo. Los profesionales de la salud comienzan a cuestionar hasta dónde pueden llegar: ¿en qué momento la compasión se convierte en un impulso para acabar con vidas? El gobierno neerlandés investiga las razones detrás del aumento constante, pero también considera ampliar la ley para permitir que cualquier persona mayor de 74 años solicite suicidio asistido sin necesidad de padecer una enfermedad grave.
Canadá observa atentamente esta situación, ya que planea legalizar la eutanasia por razones psiquiátricas para marzo del año 2027. El Comité de Derechos de las Personas con Discapacidad de las Naciones Unidas ya ha expresado su rechazo ante este plan, respaldando sus preocupaciones con datos provenientes de los Países Bajos.
La experiencia holandesa del año pasado no debe ser vista como un mero dato estadístico; es una señal clara. Terminar con vidas humanas no es compasión; es rendirse ante el sufrimiento. A medida que se intensifica el debate sobre este delicado asunto, el mundo enfrenta una elección crucial: atender esta advertencia o continuar por un camino peligroso.
La noticia en cifras
Año |
Número de Eutanasias |
Cambio respecto al año anterior (%) |
Muertes por razones psiquiátricas |
Cambio en muertes psiquiátricas (%) |
2023 |
9,068 |
- |
138 |
- |
2024 |
9,958 |
10% |
219 |
59% |
2014 |
- |
- |
- |
- |
2020 |
- |
- |
88 |
- |