La industria alimentaria se encuentra en la mira de un nuevo desarrollo que promete revolucionar el mercado lácteo: la leche producida en laboratorio, conocida como “UnReal Milk”. Este innovador producto, respaldado por Bill Gates y un grupo de visionarios globalistas, está a punto de hacer su debut en los supermercados de Estados Unidos.
Según un informe de Forbes, “UnReal Milk”, desarrollado por la startup Bostoniana Brown Foods, se presenta como la primera leche sintética completa derivada de vacas, elaborada sin necesidad de ganado. Esta iniciativa es parte de una estrategia más amplia que busca abordar el cambio climático bajo la premisa de reducir el impacto ambiental asociado con la producción láctea tradicional.
Un enfoque controvertido
El argumento detrás de esta innovación radica en las emisiones de metano generadas por el ganado. De acuerdo con informes del IPCC y la FAO, las vacas liberan más de 500 litros de metano diariamente, lo que contribuye al 3.7% de los gases de efecto invernadero a nivel global.
Forbes destaca que “la agricultura lechera enfrenta una presión creciente debido a su impacto ambiental… emitiendo metano, un gas de efecto invernadero mucho más potente que el CO?”. Los fundadores de Brown Foods—Sohail Gupta, Bhavna Tandon y Avhijeet Kapoor—afirman que su producto reduce las emisiones de carbono en un 82%, el uso del agua en un 90% y el uso del suelo en un 95%.
Validación científica y proyecciones futuras
Gupta comentó a Forbes que “UnReal Milk se produce utilizando cultivos celulares mamarios, replicando la nutrición, sabor y textura de los productos lácteos tradicionales”. Dr. Richard Braatz del MIT, quien forma parte del consejo asesor de Brown Foods, corroboró que “la primera versión de UnReal Milk ya está siendo sometida a validación en laboratorio”.
Las pruebas realizadas en el Instituto Whitehead afiliado al MIT han demostrado que esta leche sintética iguala las proteínas, grasas y carbohidratos presentes en la leche real. Se estima que para 2030, los productos lácteos cultivados en laboratorio podrían capturar hasta el 33% del mercado lácteo valorado en 893 mil millones de dólares.
Implicaciones para el futuro alimentario
No sorprende que Gates esté involucrado activamente en esta transformación del sector alimentario. En 2022, su empresa Breakthrough Energy Ventures participó en una ronda de financiamiento por 226 millones de dólares para Motif FoodWorks, otra compañía dedicada a la producción de leche artificial. Además, Imagindairy de Israel recibió 15 millones para competir en este ámbito.
Forbes menciona otros esfuerzos similares: Senara en Alemania cultiva células mamarias; Wilk en Israel produce grasas lácteas; mientras que NotCo en Chile ha recaudado 235 millones desde 2021 utilizando inteligencia artificial para imitar productos lácteos.
Nuevas fronteras: leche materna sintética
A medida que avanza esta tendencia, Biomilq, una empresa estadounidense fundada en 2019, se enfoca ahora en desarrollar leche materna cultivada en laboratorio. La CEO Michelle Egger expresó: “Nuestro producto desviará la demanda lejos de la industria láctea… nutriendo a los bebés con una opción alternativa alimentaria 100% humana”.
No obstante, este avance plantea interrogantes sobre la dirección futura del suministro alimentario global y las intenciones subyacentes detrás del impulso hacia alternativas sintéticas.
La noticia en cifras
Cifra |
Descripción |
82% |
Reducción de emisiones de carbono en comparación con la leche de vaca tradicional. |
90% |
Reducción en el uso de agua en comparación con la producción convencional de leche. |
95% |
Reducción en el uso de tierra en comparación con la producción convencional de leche. |
33% |
Porcentaje del mercado lácteo que se espera que capture la leche cultivada para 2030. |