Calin Georgescu ha expresado su descontento ante la decisión de las autoridades electorales de Rumanía, que han denegado el registro de su candidatura para las próximas elecciones presidenciales programadas para mayo. En sus declaraciones, Georgescu subrayó la gravedad de esta medida y su impacto en el panorama democrático del país.
El político rumano afirmó: «Europa es ahora una dictadura, ¡Rumanía está bajo la tiranía!». A través de su cuenta en X, hizo un llamado urgente sobre lo que considera un «golpe directo en el corazón de la democracia mundial». Además, advirtió que si la democracia en Rumanía se ve comprometida, esto podría tener repercusiones para toda la comunidad democrática global. «Esto es solo el principio», agregó.
Protestas masivas en Bucarest
La prohibición de su candidatura ha desencadenado masivas protestas en Bucarest, donde los ciudadanos han salido a las calles para manifestar su descontento y han protagonizado enfrentamientos con las fuerzas policiales.
- Georgescu había ganado la primera vuelta de las elecciones celebradas en noviembre del año anterior. Su victoria fue objeto de controversia, ya que algunos lo acusaron de ser prorruso y sugirieron una supuesta injerencia de Moscú en el proceso electoral. Sin embargo, la Agencia Nacional de Administración Tributaria rumana desmintió tales acusaciones.
- A finales de diciembre, los resultados fueron anulados, lo que marcó el inicio de una persecución política contra Georgescu. En febrero, fue detenido por las autoridades rumanas y posteriormente liberado bajo condiciones restrictivas.
- El político también ha criticado a la OTAN, denunciando que la Alianza Atlántica busca utilizar a Rumanía como un punto estratégico en un posible conflicto bélico con Rusia.
Un llamado a la acción internacional
Georgescu concluyó su mensaje con un fuerte llamado a la comunidad internacional, instando a los Estados Unidos y otras naciones democráticas a prestar atención a lo que considera una grave amenaza para los principios democráticos no solo en Rumanía, sino en todo el continente europeo.
A medida que se acercan las elecciones, el clima político en Rumanía se torna cada vez más tenso, dejando entrever posibles repercusiones significativas tanto a nivel nacional como internacional.