David Hogg propone clasificar a la NRA como grupo terrorista

David Hogg, nuevo vicepresidente del DNC, propone designar a la NRA como grupo terrorista

David Hogg, quien recientemente asumió el cargo de vicepresidente del Comité Nacional Demócrata (DNC), ha manifestado su intención de que la Asociación Nacional del Rifle (NRA) sea clasificada como un “grupo terrorista” en Estados Unidos. Esta declaración marca un punto significativo en el debate sobre el control de armas y la influencia de la NRA en la política estadounidense.

Además de esta propuesta, Hogg ha expresado su compromiso de abolir el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y desfinanciar a las fuerzas policiales en caso de que los demócratas recuperen el poder. Estas afirmaciones subrayan su postura firme en temas sociales y políticos que han generado controversia en el país.

Compromisos y declaraciones contundentes

En una reciente votación, Hogg obtuvo 215 votos, mientras que el representante estatal de Pensilvania, Malcolm Kenyatta, recibió 298 votos, superando así los 205 necesarios para convertirse en vicepresidentes del DNC. Durante su discurso de victoria, Hogg hizo un llamado a la acción: “¿Quién está listo para llevar la lucha a los republicanos y ganar esto? ¿Están listos para pelear?”

Su discurso incluyó un mensaje claro sobre la necesidad de actuar frente a la violencia armada: “Dejemos de enviar solo nuestros pensamientos y oraciones para abordar la violencia armada y hagamos algo al respecto”. Este enfoque directo resuena con muchos jóvenes que buscan cambios significativos en las políticas relacionadas con las armas.

Críticas y reacciones

A pesar de su ascenso dentro del partido, Hogg ha enfrentado críticas por su aparente falta de conocimiento sobre ciertos aspectos constitucionales. En ocasiones anteriores, ha afirmado que la Segunda Enmienda fue concebida únicamente para otorgar a cada estado el derecho a contar con una Guardia Nacional armada.

Las opiniones sobre sus propuestas son diversas. Algunos consideran que sus ideas están desconectadas de las preocupaciones del electorado estadounidense. Sin embargo, Hogg continúa defendiendo su visión y su papel activo dentro del DNC, buscando movilizar a una nueva generación hacia un cambio político significativo.