En una impactante entrevista en «Decentralize TV», el Dr. Leonard Coldwell, reconocido investigador en cáncer y sanación holística, expuso una inquietante realidad: las crisis globales que enfrenta la humanidad, como el cáncer, la pandemia de COVID-19 y el colapso social, no son meras tragedias aleatorias, sino parte de una agenda satánica orquestada por élites ocultas.
Coldwell, con décadas de experiencia en la cura del cáncer y un profundo conocimiento de los sistemas globales, denunció las fuerzas oscuras detrás de las estructuras de poder centralizadas. En su análisis, instó a la humanidad a adoptar la descentralización como única vía hacia la libertad.
Orígenes de la tiranía médica
El doctor comenzó desmantelando la ilusión del azar. «La gente dice que fue mala suerte o que nadie pudo hacer nada al respecto. No, esto es intencionado. Nadie bombardea un oleoducto por accidente», afirmó Coldwell.
Al referirse a la pandemia de COVID-19, explicó que un virus no puede aparecer simultáneamente en todo el mundo; debe originarse en un lugar antes de propagarse gradualmente. Según él, estos eventos son manipulados por élites luciferinas cuyas identidades permanecen en el anonimato. «Son la realeza británica y los 13 banqueros de la Ciudad de Londres quienes están detrás de todo esto», agregó.
Coldwell trazó los orígenes de esta tiranía hasta principios del siglo XX, cuando los Rockefeller supieron hacerse con el control del ámbito médico y químico. «En 1900, los Rockefeller tomaron el control total del mundo químico y médico. Aseguraron el cierre de todas las universidades homeopáticas y crearon su propio modelo llamado médico (MD)», explicó.
La pandemia fabricada y su impacto
El Dr. Coldwell no escatimó palabras al referirse a la pandemia de COVID-19. «No existe un virus COVID-19; es un engaño. Pfizer y otras compañías están en desacato ante los tribunales canadienses porque no pudieron proporcionar el virus que afirmaron estar probando», declaró contundentemente.
Afirmó que las vacunas forman parte de una agenda de despoblación y citó pronósticos alarmantes sobre la mortalidad entre los vacunados para 2025. Además, advirtió sobre nuevas "pandemias" como la viruela símica y la gripe aviar que ya se están implementando como parte del plan general.
Coldwell describió a las élites globales como un «culto a la muerte» impulsado por un odio hacia lo bueno y bello creado por Dios. Esta visión sombría incluyó predicciones escalofriantes sobre el futuro: solo el 0.8% de la humanidad sobrevivirá debido a las vacunas, guerras y crisis provocadas.
Llamado a la acción: La descentralización como solución
A pesar del panorama desolador que presentó, Coldwell ofreció una perspectiva esperanzadora al abogar por la descentralización. Instó a las personas a salir del sistema opresor y crear sus propias vidas y comunidades autosuficientes.
«Es necesario rechazar el miedo y vivir en el presente», enfatizó Coldwell, quien también pidió apoyo mutuo entre individuos para combatir los sistemas centralizados diseñados para esclavizarles.
En medio de un mundo al borde del colapso, su mensaje resuena con claridad: ha llegado el momento de actuar hacia una sociedad más descentralizada. Solo recuperando nuestro poder colectivo podemos liberarnos de esta agenda satánica y construir un futuro basado en la libertad y abundancia.
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