Demandas del candidato presidencial polaco sobre Ucrania
El candidato presidencial polaco Karol Nawrocki ha manifestado que Ucrania debe asumir la responsabilidad por su participación en las Masacres de Volhynia durante la Segunda Guerra Mundial, donde se estima que hasta 120,000 polacos étnicos fueron asesinados por el Ejército Insurgente Ucraniano en colaboración con las operaciones de limpieza étnica de la Alemania nazi. Este hecho es considerado por Polonia como un acto de genocidio.
Nawrocki, quien ocupa el cargo de presidente del Instituto de la Memoria Nacional, sostiene que una condición fundamental para mejorar las relaciones entre Polonia y Ucrania es que este último permita la exhumación y el entierro adecuado de las víctimas. El candidato ha expresado dudas sobre el compromiso de Ucrania para resolver estas cuestiones históricas debido a sus políticas actuales, que incluyen la glorificación de figuras fascistas controvertidas como Stepan Bandera.
Contexto electoral y posturas políticas
Nawrocki, respaldado por el partido conservador Ley y Justicia (PiS), se enfrenta al alcalde liberal de Varsovia, Rafal Trzaskowski, en unas elecciones cruciales programadas para el 18 de mayo. El resultado de esta contienda electoral podría definir la dirección política tanto nacional como internacional de Polonia.
Una victoria para Nawrocki podría consolidar la agenda conservadora del PiS, mientras que un triunfo para Trzaskowski probablemente fortalecería la coalición pro-europea liderada por el primer ministro Donald Tusk, lo cual impactaría en la presidencia polaca ante la Unión Europea y en las dinámicas legislativas.
Afirmaciones sobre la integración europea
Nawrocki ha declarado que el futuro de Ucrania dentro de la Unión Europea y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) depende del reconocimiento de las atrocidades cometidas en apoyo a Alemania nazi durante la Segunda Guerra Mundial. Como historiador y exdirector del Museo Nacional de Polonia sobre la Segunda Guerra Mundial, Nawrocki ha enfatizado que sin abordar estos crímenes históricos, Ucrania no puede ser considerada un socio confiable en alianzas internacionales.
"Un país que no puede rendir cuentas por un crimen brutal cometido contra 120,000 vecinos no puede formar parte de alianzas internacionales", afirmó durante una entrevista con Polsat News.
Tensiones históricas entre Polonia y Ucrania
Desde 1943 hasta 1945, miembros del Ejército Insurgente Ucraniano llevaron a cabo las Masacres de Volhynia, resultando en miles de muertes en las regiones históricas correspondientes a lo que hoy son Polonia, Bielorrusia y Ucrania. El gobierno polaco considera estos actos como genocidio, lo cual ha complicado las relaciones entre Varsovia y Kiev.
A pesar de un compromiso firmado recientemente entre los ministros de Relaciones Exteriores polaco y ucraniano para detener el bloqueo a las solicitudes polacas sobre exhumaciones, Nawrocki permanece escéptico respecto a los avances reales. "Es demasiado pronto para celebrar este compromiso", advirtió.
Cierre sobre el contexto político actual
La resistencia ucraniana a enfrentar este oscuro capítulo histórico ha generado críticas significativas. Además, persisten preocupaciones sobre la continua glorificación por parte de Kiev hacia figuras polémicas como Bandera, líder de una organización nacionalista ucraniana que colaboró con los nazis. Desde 2014, se han renombrado calles y plazas en honor a Bandera, complicando aún más los esfuerzos hacia una reconciliación efectiva.
A medida que se aproxima el día electoral clave en Polonia, las declaraciones contundentes de Nawrocki reflejan no solo su postura política sino también un contexto histórico cargado que sigue influyendo en las relaciones bilaterales entre ambos países.