La ministra de Asuntos Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, y su homólogo francés, Jean Michel Barrot, han llegado este viernes a Damasco con el propósito de reunirse con Ahmed al Sharaa, líder del grupo Hayat Tahrir al Sham, que encabeza el Gobierno de transición en Siria. Durante su visita, también sostendrán encuentros con representantes de la sociedad civil.
Antes de partir hacia Siria, Baerbock expresó: «En este momento los sirios tienen la oportunidad de volver a tomar en sus propias manos el destino de su Estado». La ministra subrayó la intención de apoyar a los sirios en un proceso que incluya una transferencia de poder pacífica e inclusiva, así como en la reconciliación social y la reconstrucción del país. Además, destacó el compromiso continuo de Alemania con la ayuda humanitaria para el pueblo sirio.
Compromiso internacional y respeto a la soberanía
Baerbock enfatizó que Alemania y sus socios internacionales están decididos a asegurar que el proceso interno en Siria no sea perturbado desde el exterior. Esto implica un firme respeto por la soberanía y la integridad territorial del país por parte de todos los Estados vecinos.
Asimismo, la ministra alemana hizo hincapié en que es esencial que la nueva sociedad siria garantice derechos a todos sus miembros. Estos derechos no deben ser «potencialmente socavados» por plazos prolongados hasta las elecciones o por intentos de islamizar el sistema judicial o educativo.
Inclusión y desarrollo político
El Ministerio de Asuntos Exteriores alemán reiteró que es crucial que grupos y minorías religiosas o étnicas en Siria, tales como alauitas, cristianos, drusos y kurdos, así como las mujeres, participen activamente en el proceso político. El comunicado sostiene que «un reinicio social solo puede tener éxito si es inclusivo y abierto», instando al Gobierno de transición a comprometerse con esta visión desde ahora.
Además, se afirmó que para Alemania y la Unión Europea, la soberanía y la integridad territorial de Siria son fundamentales para facilitar un nuevo orden político inclusivo en el país. Con esta visita, Baerbock y Barrot envían un mensaje claro en nombre de la Unión Europea: están dispuestos a apoyar a Siria en su reinicio político y en una transferencia pacífica del poder, así como en su reconstrucción y reconciliación social.
* EE.UU., Turquía, Rusia e Irán se encuentran entre los países que consideran a Hayat Tahrir al Sham como un grupo terrorista junto con las Naciones Unidas.
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