La concejal de Boston, Tania Fernandes Anderson, quien fue una inmigrante indocumentada, fue arrestada el 6 de diciembre y acusada formalmente de seis delitos graves. Las imputaciones incluyen la complicidad en fraude electrónico y robo de programas financiados por el gobierno federal, en relación con un presunto esquema de sobornos.
Fernandes Anderson, quien se convirtió en ciudadana estadounidense en 2019, hizo historia al ser la primera musulmana y la primera inmigrante africana en ocupar un cargo en el concejo municipal de Boston. Representa un distrito diverso y de bajos ingresos, y ha sido una figura clave en la política progresista de la ciudad.
Detalles del caso y las acusaciones
Las acusaciones surgen de un supuesto soborno pagado a un miembro del personal para acceder a fondos públicos, que ascienden a varios miles de dólares provenientes del dinero de los contribuyentes. Los investigadores afirman que Fernandes Anderson contrató a un familiar y organizó un esquema de sobornos que involucraba aproximadamente $10,000 en efectivo.
Documentos judiciales indican que Fernandes Anderson enfrentaba dificultades financieras en 2023, incluyendo cargos por sobregiros y problemas para cumplir con pagos de automóvil y alquiler. Estas presiones económicas se consideran factores que pudieron haber contribuido al presunto fraude.
Reacciones políticas y consecuencias
La alcaldesa de Boston, Michelle Wu, instó a Fernandes Anderson a renunciar, afirmando que las acusaciones socavan la confianza pública. “La gravedad de estos cargos perjudica la confianza pública y le impedirá servir efectivamente a la ciudad”, declaró Wu.
Fernandes Anderson fue acusada formalmente de cinco cargos por complicidad en fraude electrónico y un cargo por complicidad en robo a programas que reciben fondos federales. Durante una conferencia de prensa, el fiscal federal Joshua Levy detalló las acusaciones, señalando que el esquema implicaba el pago de un soborno a un empleado a cambio del acceso a fondos públicos.
Contexto personal y profesional
A lo largo del tiempo, Fernandes Anderson ha sido objeto de escrutinio por sus prácticas laborales. En 2022 admitió haber contratado a su hermana e hijo como miembros del personal, lo cual violaba las políticas municipales, lo que resultó en una multa de $5,000 impuesta por la Comisión Estatal de Ética de Massachusetts.
A pesar de esto, continuó involucrando a familiares en sus operaciones. La concejal es la primera funcionaria municipal en Boston en ser acusada federalmente desde 2008. Hasta el momento no ha respondido solicitudes para comentar sobre el caso, y su abogado ha declinado hacer comentarios.
A medida que se desarrolla esta situación legal, queda claro que las implicaciones para Fernandes Anderson son significativas tanto desde el punto de vista personal como profesional.
La noticia en cifras
Cifra |
Descripción |
6 |
Número de cargos criminales (felonías) a los que se enfrenta. |
$10,000 |
Monto total involucrado en el esquema de sobornos. |
$7,000 |
Cantidad de dinero en efectivo que supuestamente fue devuelto a Fernandes Anderson. |
2019 |
Año en que Fernandes Anderson se convirtió en ciudadana estadounidense. |