Un tesoro de la época vikinga, que permaneció intacto durante más de mil años, fue descubierto por arqueólogos noruegos de la Universidad de Stavanger. En un comunicado de prensa, sostienen que este hallazgo poco común puede ofrecer valiosa información sobre la vida en un periodo bastante agitado.
En el suroeste de Noruega, sobre la ladera de una montaña, se encontraban excavando los arqueólogos en el lugar donde se construirá una futura carretera, con el objetivo de descubrir objetos de valor científico. A una profundidad de aproximadamente 20 centímetros bajo la superficie actual, hallaron cuatro grandes brazaletes ornamentados de plata que pertenecen a la época entre los años 800 y 1050.
Un asentamiento escandinavo existió en esa área hace más de mil años, según los científicos. En algún momento, este lugar fue consumido por el fuego y contaba con diversas construcciones tanto para humanos como para animales. Se cree que las joyas de plata quedaron sepultadas bajo el suelo de una pequeña vivienda, la cual podría haber sido utilizada por los esclavos de una granja vikinga.
Los especialistas, en un primer momento, creyeron que habían descubierto objetos fabricados con el común alambre de cobre presente en las tierras agrícolas. Sin embargo, un análisis posterior reveló que se trataba de valiosas piezas de plata. Además de los brazaletes, se encontraron otros artículos como vasijas, remaches, hojas de cuchillo y piedras para afilar.
En Noruega, durante ese periodo, no existían minas de plata en funcionamiento, lo que implicaba que los vikingos debían obtener todo el metal de fuentes externas, ya fuera mediante comercio, como obsequios o como parte de un botín. Los especialistas llegaron a la conclusión de que los residentes de la granja probablemente abandonaron sus pertenencias más valiosas al huir hacia las montañas para escapar de un ataque. Desde aquel momento, nadie se preocupó por recuperar esos objetos, pues el asentamiento estaba destinado a un final trágico.
Un hallazgo excepcional ha sido realizado, ya que objetos de esta índole son poco frecuentes en el sitio donde fueron depositados. Normalmente, estos valiosos artefactos aparecen en campos arados, lo que implica que han sido extraídos por completo de su contexto original", explicó Volker Demuth, el arqueólogo a cargo del proyecto.