Una mujer de Tennessee recibió una condena de más de tres años de prisión por impedir el acceso a un centro de Planned Parenthood en Manhattan, al que acudían mujeres para interrumpir su embarazo.
Bevelyn Beatty Williams, de 33 años, recibió una sentencia por delitos federales relacionados con la conspiración para infringir la Ley de Libertad de Acceso a las Entradas Clínicas (FACE). Su conducta incluyó "fuerza, amenazas de fuerza y obstrucción física, lo que resultó en daños corporales".
En diciembre de 2022, se presentó una acusación contra la defensora pro vida, quien colaboró con una amiga para impedir que mujeres interrumpieran sus embarazos en varios estados, tales como Nueva York, Tennessee, Georgia y Florida.
El incidente en un centro de abortos de Planned Parenthood en Manhattan está vinculado al cargo de "daño corporal". En este evento, un miembro del personal intentó abrir la puerta desde el exterior para permitir la entrada de una mujer. Sin embargo, Williams se negó a apartarse y utilizó su peso para mantener la puerta cerrada, mientras el empleado seguía intentando abrirla para que la mujer pudiera ingresar.
Un representante de Planned Parenthood declara que Williams le causó una lesión en la mano al aplastarla; sin embargo, Williams argumenta que se trató de un accidente y, por ende, no está protegido por la Ley FACE. Asimismo, Williams afirma que el miembro del personal infringió una norma de no compromiso al grabar y dialogar con ella mientras protestaba frente a las instalaciones de Planned Parenthood.
Tras un juicio que se extendió por nueve días, la jueza de distrito Jennifer L. Rochon, designada por el presidente Biden, condenó a Williams por un cargo de violación de la Ley FACE. Esta semana, al momento de dictar sentencia, el mismo juez impuso una pena de 41 meses de prisión, seguida de dos años de libertad supervisada.