El presidente de Colombia, Gustavo Petro, propuso este jueves prolongar siete años el plazo para la implementación del Acuerdo de Paz firmado en 2016 por el Gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC-EP), que tenía originalmente 15 años para ser completado.
Ante el Consejo de Seguridad de la ONU enfatizó la necesidad de intensificar los esfuerzos para lograr la paz en Colombia y planteó un “fast track” que siente las bases de una paz definitiva.
Petro explicó que su país está dividido en dos y que por ello no ha logrado un acuerdo nacional que le permita hacer las transformaciones necesarias. Gran parte de los colombianos se opuso al Acuerdo de Paz y votó en contra, quienes lo rechazan, dijo, no quieren cambiar la normas y sin cambiarlas no se avanzará, acotó.
Pero si esta es la sociedad más desigual del mundo “¿cómo no se van a cambiar las normas?”, preguntó.
El mandatario sostuvo que una de las prioridades para la implementación del Acuerdo es la integración del territorio nacional al desarrollo, para lo cual es urgente la reforma rural integral.
La accidentada geografía de Colombia genera una enorme diversidad cultural pero también produce dificultades, recordó, antes de explicar el conflicto en el país como varios conflictos regionales.
En este sentido, aseveró que Colombia no ha solucionado su problema de violencia porque no ha podido incluir el territorio. Detalló que de los 55 millones de habitantes que tiene Colombia, diez millones son campesinos, aunque sólo poseen el 1% de la tierra fértil.
“Hay que integrar socialmente el territorio”, insistió, es el centro del proceso de paz.
Con respecto al cultivo de drogas al que los campesinos se vieron orillados, señaló que el Acuerdo propuso cambiar lo ilícito por lícito, por lo que es imperativa la reforma rural integral.
Los ejes para la implementación del Acuerdo deben ser la reforma agraria, la transformación del territorio y esclarecimiento de la verdad judicial, indicó.
Además de la prolongación del plazo de implementación del Acuerdo, el presidente colombiano pidió al Consejo de Seguridad que tome medidas que “potencien la capacidad financiera” del país y liberen fondos para continuar el proceso de paz.
Al referirse a la continuación de la violencia, Petro hizo una tercera solicitud al órgano de seguridad de la ONU: una misión internacional de investigación que apoye a la Fiscalía para “establecer los autores intelectuales y materiales del asesinato sistémico de excombatientes” y para frenar el surgimiento de grupos paramilitares en Colombia.
El “fast track” presentado por Petro al Consejo de Seguridad para la implementación del Acuerdo de Paz busca la aprobación más rápida de leyes y reformas y consiste en los siguientes puntos:
Gustavo Petro se dirigió al máximo órgano resolutivo de Naciones Unidas en una sesión para revisar la implementación del Acuerdo de Paz en la que también participó por primera vez Diego Tovar, signatario del Acuerdo por parte de las FARC-EP y hoy representante del partido Comunes y de la Comisión para la Seguimiento, Impulso y Verificación de la Implementación del Acuerdo.