Con motivo del Día Internacional de las Familias, que se celebra el 15 de mayo, VOX llevará al Pleno del Senado de mañana una Declaración Institucional en la que defiende la importancia de esta institución que «precede al Estado y constituye un pilar esencial sin el que, tanto la sociedad como el Estado, carecen de fundamento». Además, «una sociedad de familias fuerte es la mejor barrera contra problemas sociales y personales: la soledad no deseada, la delincuencia, las adicciones, los suicidios, los problemas de salud mental o el aislamiento social se ven claramente aminorados por la presencia estable de familias».
La formación que lidera Santiago Abascal reclama a los poderes públicos el cumplimiento de la Constitución para garantizar a las familias la protección social, económica y jurídica porque «a día de hoy, no ocurre», comprometiendo el futuro de España, que «depende de que las generaciones venideras tengan las oportunidades suficientes para formar su propia familia».
Los senadores de VOX enumeran en su Declaración Institucional algunos de los problemas a los que se enfrentan los españoles para poder formar una familia, y que comienza en un mercado de trabajo «cada vez es más hostil y precario»: «Los empleos estables y los salarios dignos, a pesar de que el Gobierno de Pedro Sánchez maquille las cifras de paro, son una quimera para muchos». En definitiva, «demasiados jóvenes españoles se ven obligados a retrasar el momento de formar su familia porque ni siquiera pueden mantenerse a ellos mismos sin la ayuda de otros familiares o sin compaginar varios empleos».
Denuncian también «la brecha maternal», que «penaliza a las mujeres en su trabajo por el hecho de ser madres e incluso por la simple manifestación del deseo de serlo en un futuro, algo que se silencia por parte del consenso progre». Además, se refieren a lo «imposible» de conseguir una vivienda, y reclaman una «profunda rebaja fiscal, con la construcción de viviendas sociales, con la liberación del suelo secuestrado por las Administraciones públicas y con la protección de la propiedad privada».
Asimismo, los senadores se dicen preocupados por la inseguridad creciente, «consecuencia en gran medida de una inmigración ilegal descontrolada, que está degradando nuestros barrios, volviéndolos irreconocibles». «Se fomenta el efecto llamada de una inmigración ilegal masiva mientras se niega a los españoles la posibilidad de formar una familia»; «se dan ayudas sociales a extranjeros que han asaltado nuestras fronteras, empujados muchas veces por las mafias de tráfico de personas, mientras se rechazan políticas que creen las condiciones necesarias para que los españoles puedan tener hijos y criarlos con dignidad», denuncian.
Frente a estos problemas, «urge desarrollar políticas que reconozcan el sacrificio y compromiso requeridos para formar una familia y apoyen su supervivencia». «Poner a la familia en el centro de todas las políticas es crucial, pues una Nación con familias sólidas es una Nación fuerte», concluyen.