CLAVES

El milagro de la Naval de Manila: la batalla que acabo con la amenza holadesa sobre Filipinas

OpenAI | Viernes 09 de febrero de 2024

En un nuevo capítulo de la serie histórica presentada por Jesús Á. Rojo, nos adentramos en los momentos más importantes de la historia de España e Hispanoamérica. En esta ocasión, hablaremos de las batallas de la Naval de Manila, un acontecimiento que cambió el curso de la historia y marcó el destino de Filipinas.

El 9 de abril de 1652, el mundo presenció una serie de victorias navales que fueron declaradas un milagro por la Archidiócesis de Manila. Después de una minuciosa investigación canónica, se concluyó que las batallas fueron obra divina, lo que dio origen a las centenarias festividades de Nuestra Señora de La Naval de Manila. La Armada Española se enfrentó a una gran amenaza proveniente de los Países Bajos. Los holandeses, con su poderosa flota, tenían como objetivo conquistar Filipinas y controlar las rutas comerciales en el Pacífico.

Sin embargo, la Armada Española no se dejó amedrentar y se preparó para hacer frente a esta invasión. La Batalla de la Naval de Manila se llevó a cabo en octubre de 1646, y fue la primera de las cinco batallas que marcaron este importante acontecimiento histórico. A pesar de estar en desventaja numérica, la Armada Española demostró su valentía y estrategia, logrando una victoria que sorprendió a propios y extraños.

Las posteriores batallas, que se desarrollaron en marzo de 1647, abril de 1648, septiembre de 1649 y octubre de 1649, también resultaron en victorias para la Armada Española. Estas batallas fueron fundamentales para frenar el avance de los holandeses y proteger la soberanía de Filipinas. La Archidiócesis de Manila, tras una rigurosa investigación, determinó que estas victorias fueron un auténtico milagro.

La fe y devoción de los filipinos hacia la Virgen María fue fundamental durante estos enfrentamientos, y su intervención divina se hizo evidente en cada una de las batallas. El pueblo filipino, agradecido por la protección y victoria alcanzada, comenzó a rendir homenaje a Nuestra Señora de La Naval de Manila. Esto dio origen a las festividades que se celebran hasta el día de hoy, en las que se realizan procesiones y se venera a la Virgen como patrona y protectora de Filipinas.

La Batalla de la Naval de Manila se convirtió así en un hito histórico que simboliza la lucha y resistencia de los filipinos y españoles frente a las amenazas extranjeras. Esta victoria no solo marcó el destino de Filipinas, sino que también dejó una huella imborrable en la historia de la Armada Española y en el orgullo nacional de ambos países. Hoy en día, la historia de la Naval de Manila y la devoción hacia Nuestra Señora de La Naval continúan siendo un legado vivo en Filipinas.

Estos eventos históricos nos recuerdan la importancia de la fe, la valentía y la unidad en la defensa de nuestra identidad y soberanía. En conclusión, la Batalla de la Naval de Manila fue un suceso trascendental que cambió el curso de la historia. La intervención divina, la valentía de la Armada Española y la devoción hacia Nuestra Señora de La Naval se unieron para lograr una victoria épica sobre los holandeses y proteger el destino de Filipinas.

TEMAS RELACIONADOS:


Noticias relacionadas