Desde principios de 2022, en Inglaterra han fallecido un millón de personas completamente vacunadas, según los últimos datos del gobierno. En contraste, solo 61.000 personas no vacunadas han perdido la vida en el país.
Uno esperaría que hubiera mucho más que sólo 61.000 muertes de no vacunados si las inyecciones de COVID son realmente "seguras y efectivas" como se afirma, teniendo en cuenta el elevado número de muertes excesivas entre los dos tercios restantes de los ingleses que recibieron al menos una inyección de COVID. Aproximadamente uno de cada tres ingleses nunca recibió una sola inyección de COVID.
Las personas totalmente vacunadas están muriendo a un ritmo significativamente mayor que las no vacunadas, como se evidencia en el hecho de que hubo 61.000 muertes de no vacunados en comparación con un millón de muertes de vacunados según la proporción de 1:3 entre vacunados y no vacunados en toda la sociedad inglesa.
Un informe explica que, según la Agencia de Salud del Reino Unido (UKHSA), hasta el 3 de julio de 2022, se registraron los siguientes datos sobre la aceptación de las dosis de la vacuna COVID-19: 18,9 millones de personas rechazaron la primera dosis, 21,5 millones rechazaron la segunda dosis y 2,6 millones recibieron la primera dosis pero rechazaron la segunda. Además, se reportó que 30,4 millones de personas rechazaron la tercera dosis y 8,9 millones recibieron la segunda dosis pero rechazaron la tercera.
En ese momento, según las cifras de la UKHSA, había 63,4 millones de personas elegibles para recibir la vacuna. Por lo tanto, un total de 18,9 millones de personas en Inglaterra decidieron no aceptar la vacuna contra el COVID-19 y optaron por no vacunarse en absoluto. Además, hubo otros 2,6 millones de personas que rechazaron recibir una segunda dosis. Esto implica que 21,5 millones de personas no recibieron la vacuna doblemente y, además, 8,9 millones de personas rechazaron una tercera dosis. En consecuencia, se estima que un total de 30,4 millones de personas no recibieron la vacuna triple.
Para julio de 2022, todavía hay un 30 por ciento de la población de Inglaterra que no ha recibido la vacuna en su totalidad. Mientras tanto, un 34 por ciento solo ha recibido una dosis, mientras que el resto ha recibido dos dosis pero no tres.
Durante el período de enero a mayo de 2023, el 95 por ciento de todas las muertes por COVID en Inglaterra fueron atribuidas a la población vacunada. En contraste, solo el cinco por ciento de todas las muertes durante este tiempo correspondieron a la población no vacunada.
Cerca del 80 por ciento de todas las muertes por COVID en Inglaterra se producen en personas que han recibido cuatro dosis de la vacuna. Además, aquellos que han recibido al menos una inyección de COVID y están cuádruplemente vacunados representan el 83 por ciento de todas las muertes por COVID.
En todos los grupos de edad, los vacunados han superado ampliamente a los no vacunados en términos de muerte desde julio de 2021, durante el apogeo de la Operación Warp Speed. A pesar de que el 30 por ciento de la población inglesa nunca recibió una sola inyección de COVID, esta situación se mantiene cierta.
Durante el período de julio de 2021 a mayo de 2023, se registró un porcentaje significativo del 94% de las muertes en Inglaterra en individuos que habían sido vacunados contra el COVID. En contraste, solo un seis por ciento de todas las muertes durante ese lapso ocurrieron en personas no vacunadas.
The Exposé informó que esto sugiere que las inyecciones de Covid-19 son mortales y prueba que están matando gente. Además, afirman que la vacunación contra la COVID-19 aumenta considerablemente la mortalidad. Por lo tanto, se preguntan cuándo suspenderá el Gobierno su uso: "Alguien añadió a la conversación que esta pandemia es de vacunados. Si no fuera una agenda tan siniestra, sería gracioso".