Sometido a una cirugía cardíaca y a un tratamiento para combatir el cáncer, será el primer emperador en abdicar en más de dos siglos. Con apenas un hilo de voz y muy emocionado se lo escuchó al que es, probablemente, el dirigente más respetado en el mundo: su rectitud, bondad y empatía es reconocida hasta por los adversarios de Japón.
"Me da consuelo que la 'Era Heisei' -título de su reinado- esté llegando a su fin libre de guerra en Japón" ha dicho el emperador del Sol Naciente que reinó durante una era de paz, armonía y un gran desarrollo tecnológico y, consecuentemente, económico. Evitando mensajes políticos explícitos, Akihito lanzó su indisimulada preocupación por el creciente discurso militarista y nacionalista sostenido, entre otros, por el primer ministro, Shinzo Abe.
Entretanto Putin advierte que se subestima el riesgo de una guerra nuclear, y días atrás presidió el ensayo del misil hipersónico Avangard -que recorrió 6000 km entre los Urales y Kamchatka- que, según el gobierno ruso, puede superar el escudo antimisiles estadounidense. "Somos los primeros en tener este tipo de arma", aseguró Putin. EE.UU. no tiene defensas contra las armas hipersónicas que también China desarrolla. Moscú ha estudiado las vulnerabilidades americanas, por eso prefiere la velocidad y sistemas que no tracen trayectorias predecibles.
En la otra parte del mundo, la detención en Vancouver de Meng Wanzhou, vicepresidenta e hija del fundador de Huawei -el mayor proveedor global de telecomunicaciones- ha desatado una tormenta diplomática. El pasado 11 de diciembre se le concedió libertad condicional mientras se resuelve la solicitud de extradición solicitada por la fiscalía estadounidense que la acusa de esquivar las sanciones a Teherán. En represalia, Pekín ha detenido al menos dos canadienses
En cualquier caso, es fuerte la sospecha de que el gigante chino está en la mira de Washington y de algunos de sus aliados porque la empresa lidera la carrera en el desarrollo de la tecnología 5G. Además de las chinas Huawei y ZTE, las otras empresas dominantes en esta tecnología son las europeas Ericsson y Nokia y la japonesa NEC.
“Estamos perdiendo (…). Quien domine el mercado del 5G tendrá una tremenda ventaja para la información”, asegura el Consejo de Seguridad Nacional de EE.UU. Por cierto, China por “razones de seguridad” y para defender sus compañías estatales, publicó nuevas normas para las empresas, extranjeras y chinas, privadas o estatales, que contienen una “lista negativa” de cuatro tipos de empresas prohibidas y otras 147 categorías que necesitan permisos del Gobierno.
Todo esto me recuerda los casos de Snowden y Assange. A ver. La información -la verdad- es el “arma” más eficiente para conseguir la paz y el desarrollo económico. Por esto, los Estados modernos -que basan su “autoridad” en el monopolio de la violencia- pretenden controlar y limitar la información y la verdad, porque los deja inermes. De nada sirve el mayor ejército contra un solo ciudadano capaz de conocer y adelantar sus movimientos y, entonces, jaquearlo o ponerse a resguardo.
¡Termo heika banzai! -¡Diez mil años de vida al emperador!- de la paz, de la verdad, del desarrollo de su pueblo.