Los grandes fondos de inversión globales BlackRock, Blackstone, Vanguard y State Street superan en activos bajo administración más de 22 billones de dólares, una cifra superior al PIB de EEUU.
Estos fondos controlan las grandes empresas armamentísticas del mundo: Lockheed Martin, Raytheon Technologyes, Boeing, Northop Grumman y General Dinamics.
El mercado armamentístico global facturaba unos dos billones de dólares antes de la guerra de Ucrania y se ha reactivado brutalmente desde entonces. Ahora los asesinos de Hamas le han dado otro empujón. Deberían darles comisión.
Larry Fink, presidente y consejero delegado de BlackRock, es seguramente el hombre más poderoso de las finanzas globales. En 2010 su salario base ascendió a 39,9 millones de dólares, pero sus ingresos adicionales superaron los 2.400 millones de dólares, según datos de Wikipedia. Larry Fink es judío.