El presidente del PP subraya que nuestro país necesita desbloquear la legislatura “y no hacerlo de cualquier modo”, sino con un Ejecutivo con “vocación, ambición y determinación”, que gobierne para todos y acometa las reformas que España necesita en estos momentos.
“Nadie ha dado su consentimiento para demoler el Estado de derecho a cambio de unos pocos votos para la investidura”
Aboga por usar “todos los instrumentos” que las urnas han dado al PP, como los 137 escaños del Congreso, la mayoría absoluta del Senado, los gobiernos autonómicos y ayuntamientos, y “si hace falta la vía judicial”, para trasladar al Gobierno, “con toda contundencia, que no vamos a consentir estos despropósitos”.
Feijóo sostiene que “no es de recibo intentar controlar el TC al servicio del PSOE por un escaño que el PP ha ganado en las urnas, utilizar el Congreso de forma fraudulenta para mejorar la financiación de partidos que no tienen derecho a tener grupo propio y ver a una vicepresidenta del Gobierno reunirse con una persona buscada por la justicia”.
Reivindica un gobierno del PP libre de ataduras, engaños y concesiones: “Somos los únicos que podemos y queremos hacerlo”, y afirma que “hemos iniciado el camino que nos llevará a gobernar España, ahora o pronto”, remarca Feijóo, quien añade que el PP no lo hará mediante “subastas, atajos ni chantajes” o acatando lo que impongan unos pocos por su interés, sino atendiendo las necesidades de todos.
“Llegaremos al Gobierno a través de la defensa de la igualdad, de los principios que nos unen, la coherencia con los compromisos con nuestros votantes y de dar el protagonismo que les corresponde a las prioridades de los ciudadanos”
“Prefiero pagar el precio de un ‘no’ por defender esto a un ‘sí’ a un desgobierno de la desigualdad. Y prefiero poder mirar a los ojos de los españoles desde la oposición que bajar la cabeza por llegar a La Moncloa”, a la par que resalta que siempre merece la pena elegir el camino de la libertad, “más cuando está en peligro”; de la dignidad, “más cuando la indignidad amenaza con inundarlo todo”; y de la igualdad, “especialmente cuando alguien está dispuesto a cercenarla por sus intereses particulares”.
Critica que el Gobierno pretenda “arrinconar” a todo aquel que, aún habiéndoles votado, “les recuerda que no recibieron su voto para lo que quieren hacer”. “Nosotros daremos voz a esa gran mayoría de españoles y no se les va a silenciar”, incide, mientras subraya que los españoles no votaron ni al PP ni al PSOE para renunciar a sus compromisos a cambio del poder, para sustituir las preocupaciones de las familias “por los privilegios de unos pocos” o para dejar en un segundo plano el empleo, las pensiones o la educación “y dar prioridad a amnistías, referéndums e independentismo”.
Desmonta la “falacia socialista” de que la investidura tenga que pasar irremediablemente por el independentismo y defiende un “acuerdo nacional por el reencuentro y la igualdad de todos” como alternativa al sometimiento de las minorías.
“En estas semanas, Puigdemont ha marcado el paso a Sánchez, y como ha demostrado que ningún precio le parece demasiado alto, ERC ha venido a subir la apuesta”, lamenta.
“El independentismo sale hoy a la calle para competir por demostrar quién pide más, quién es más decisivo en la investidura de Sánchez y quién es capaz de humillar con más intensidad al Estado de derecho”, señala Feijóo, quien considera que “lo peor es que nos tememos que Sánchez dirá que sí”.
Lamenta que el PSOE haya pasado de votar a favor de la aplicación del 155 en Cataluña a estar dispuesto a que la presidencia del Gobierno de España esté “intervenida por el independentismo”, que pretende “responder a aquel 155 constitucional con uno inconstitucional”.
“No tengo esperanza en que este PSOE vuelva a los acuerdos de Estado, pero a mí me han elegido para que insista una y otra vez en ellos, no para que abandone el sentido de Estado y me entregue al interés personal con el independentismo”, remarca.
Por último, traslada su solidaridad y fraternidad a Marruecos, a la vez que agradece la ayuda y el esfuerzo de los efectivos españoles que se han trasladado para recuperar vidas y disminuir el impacto en nuestro país “vecino y hermano”.