Este jueves, se anunciaron los planes de la Administración del Programa de Adquisiciones de Defensa de Corea del Sur para desarrollar un arma láser de 300 kilovatios. Esta arma podrá ser utilizada contra aviones, misiles y drones. Según un comunicado emitido por la Administración, esta tecnología será superior a los sistemas de armas láser antiaéreas existentes en la actualidad. Además, tendrá la capacidad de interceptar grandes vehículos aéreos no tripulados, proyectiles de radar y misiles guiados subsónicos. Se espera que el desarrollo esté completado para el año 2024, después de llevar a cabo un estudio de viabilidad.
La agencia asegura que los láser, a diferencia de las armas antiaéreas convencionales, pueden interceptar múltiples objetivos con precisión continua si se les suministra suficiente energía, lo que los convierte en un sistema de armas que cambiará las reglas del juego en el futuro campo de batalla. La semana pasada, Corea del Norte realizó un ejercicio militar simulando un ataque nuclear táctico contra bases de mando y aeropuertos operativos de Corea del Sur.
En respuesta a una maniobra conjunta realizada por EE.UU. y Corea del Sur el mismo miércoles, con participación de un bombardero estratégico B-1B norteamericano y cazas de Seúl, el simulacro del Ejército Popular fue precisado desde el Estado Mayor General norcoreano. Al mismo tiempo, el Norte continúa modernizando su arsenal militar. Como parte de la conmemoración del 75.º aniversario de la fundación de la República Popular Democrática de Corea, Pionyang presentó esta semana su primer submarino equipado con armas nucleares tácticas.