La Misión de Verificación de la ONU en Colombia vigilará el alto el fuego bilateral acordado entre el Gobierno de ese país y el grupo guerrillero Ejército de Liberación Nacional, que entrará en vigor mañana 3 de agosto por un periodo de 180 días, tras el cual se evaluará su continuidad.
La nueva tarea de la Misión quedó estipulada en una resolución que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas adoptó por unanimidad este miércoles por la tarde y que amplía el mandato con el que ya operaba esa Misión establecida en 2016 luego de la firma de los Acuerdos de Paz.
La ampliación del mandato responde a la petición que hiciera a la ONU el Gobierno de Colombia para que se encargara de verificar los ceses de fuego acordados en el marco de la política de “paz total” del presidente del país, Gustavo Petro.
El texto, presentado por el Reino Unido y discutido desde el mes pasado por los integrantes del Consejo especifica que la Misión “vigilará y verificará la aplicación del alto el fuego esbozado en el Segundo Acuerdo con Cuba entre el Gobierno de Colombia y el ELN” con hasta 68 observadores internacionales adicionales.
Además, expresa la disposición del Consejo de considerar la posibilidad de encomendar a la Misión “que supervise y verifique la aplicación de un acuerdo de cesación del fuego entre el Gobierno de Colombia y el grupo armado autodenominado EMC [Estado Mayor Central] cuando el Secretario General confirme que se ha alcanzado un alto el fuego que incluya protocolos de verificación apropiados”.
El EMC está conformado por disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), signatarias originales de los Acuerdos de Paz con el Gobierno colombiano.
El documento también adopta la propuesta del Secretario General de la ONU de reportar sobre las tareas adicionales de la Misión en los informes trimestrales que ya presenta actualmente. Dichas actualizaciones incluirán, asimismo, la contribución del alto el fuego al mejoramiento de la situación humanitaria en las zonas afectadas por el conflicto.
Los integrantes del Consejo de Seguridad coincidieron en señalar que es un paso más en el camino de Colombia hacia la paz.
El embajador brasileño ante la ONU, Sérgio França Danese, dijo que como país garante, Brasil “apoya integralmente la estrategia del presidente Petro para alcanzar una paz total en Colombia y reconoce la necesidad de los diálogos adicionales que se realizan para expandir los beneficios de la paz en todo el país”
El diplomático brasileño agregó que la Misión de Verificación de la ONU puede tener un papel destacado de apoyo al proceso de diálogo y en los acuerdos de cese al fuego con diferentes grupos armados.
França Danese afirmó que la paz y el desarrollo sostenibles son la “única senda que garantiza el estado de derecho y el bienestar para todos colombianos”.
El Gobierno colombiano y el ELN negociaron durante casi diez meses el alto el fuego bilateral que cobrará vigencia cuatro días antes del primer aniversario al frente del país del presidente Gustavo Petro, quien se comprometió con conseguir la “paz total” en Colombia negociando directamente con los grupos armados.