La LME descubrió que en uno de sus almacenes, en lugar del níquel que se esperaba, había bolsas llenas de piedras.
El viernes pasado, LME informó que hubo "irregularidades" en una serie de envíos físicos de níquel provenientes de una instalación específica. Según una fuente cercana al asunto, se descubrió que los cargamentos supuestamente de níquel contenían piedras en su lugar.
De acuerdo con la entidad, se detectaron "irregularidades evidentes, incluyendo el peso de los sacos". Los sacos fueron almacenados en un depósito en Róterdam, Países Bajos, que es administrado por Access World.
Después de una solicitud de la LME, un operador realizó una inspección y encontró que faltaban 54 toneladas de níquel con un valor de 1,3 millones de dólares. Como resultado, la bolsa ordenó a todos los operadores de almacenes autorizados que repitieran las inspecciones para verificar si había más irregularidades.
Según un periódico, la LME ha sufrido otro revés en su reputación debido a una partida falsa de níquel en su sistema. Esto ocurre después de que el año pasado se cancelaran las operaciones con níquel tras una subida histórica de precios, lo que provocó investigaciones regulatorias y demandas de inversores.
De acuerdo con FT, la bolsa tenía planeado reabrir las negociaciones de níquel el lunes para recuperar la confianza en el mercado. Sin embargo, debido al riesgo de encontrar más partidas irregulares en los almacenes, la LME decidió posponer la reapertura del comercio por una semana.
Bolsa de metales
La Bolsa de Metales de Londres (LME, por sus siglas en inglés) es la principal bolsa de metales del mundo, con sede en Londres, Reino Unido. Fue fundada en 1877 y actualmente es propiedad de la Hong Kong Exchanges and Clearing (HKEX).
La LME es un mercado mundial para la negociación de contratos de futuros y opciones de metales no ferrosos, incluyendo cobre, aluminio, plomo, zinc, níquel, estaño y otros metales especiales. La bolsa también ofrece precios de referencia para estos metales, que son utilizados en todo el mundo por la industria para fijar precios de compra y venta.
La LME es conocida por su sistema de entrega física, lo que significa que los contratos negociados en la bolsa pueden ser liquidados mediante la entrega física del metal correspondiente. Esto hace que la LME sea una bolsa importante para la industria de los metales y los inversores que buscan operar en el mercado de metales.
La bolsa también tiene una serie de reglas y regulaciones que buscan garantizar la integridad del mercado y la protección de los inversores. Además, la LME ha desarrollado una serie de iniciativas para fomentar la transparencia en el mercado y reducir el impacto ambiental de la minería y la producción de metales.