Las compañías de seguros de salud están utilizando herramientas predictivas no reguladas para reducir los beneficios de pacientes vulnerables, sin tomar en cuenta la opinión de los médicos humanos y posponiendo el tratamiento de personas gravemente enfermas. Esto está sucediendo a pesar de que estas herramientas pueden acelerar la muerte de los pacientes más enfermos del país. Además, Medicare Advantage se ha vuelto cada vez más rentable para las aseguradoras, lo que ha llevado a más estadounidenses mayores de 65 años y personas con discapacidades a elegir estos planes de primas más bajas.
Un informe reciente ha descubierto que los algoritmos de inteligencia artificial utilizados por las aseguradoras de Medicare Advantage están causando un aumento en las denegaciones de atención médica, lo que podría tener un impacto negativo en millones de estadounidenses mayores que dependen del programa financiado por los contribuyentes. En algunos casos, las aseguradoras están reduciendo los beneficios para pacientes de edad avanzada basándose en las recomendaciones de la IA, sin tener en cuenta las opiniones de los médicos humanos. Esto ha llevado a conflictos entre médicos y aseguradoras, y ha retrasado el tratamiento de pacientes gravemente enfermos. Además, estas acciones van en contra de las reglas básicas sobre lo que deben cubrir los planes de Medicare.
Un estudio resaltó el caso de Frances Walter, una mujer de 85 años de Wisconsin que tenía una fractura en su hombro izquierdo y era alérgica a los analgésicos. A pesar de necesitar más atención médica, su aseguradora de Medicare Advantage, Security Health Plan, dejó de cubrir sus gastos después de 17 días debido a la decisión del algoritmo utilizado, sin tener en cuenta la opinión del médico. Como resultado, Walter tuvo que usar sus ahorros y registrarse en Medicaid para continuar con su tratamiento.
Las aseguradoras de salud están utilizando cada vez más algoritmos predictivos no regulados para decidir cuándo suspender los pagos de tratamientos para pacientes mayores. Aunque las compañías aseguran que estas herramientas son solo sugerencias, en la práctica se utilizan como reglas estrictas sin tener en cuenta las circunstancias individuales o cambios en las condiciones del paciente. Debido a que más personas mayores de 65 años y con discapacidades optan por planes con primas más bajas y cobertura de medicamentos recetados, Medicare Advantage se ha vuelto más rentable para las aseguradoras.
La FDA está evaluando los modelos de inteligencia artificial que utilizan los médicos para detectar enfermedades como el cáncer y recomendar tratamientos adecuados. Sin embargo, las herramientas que usan las aseguradoras para decidir si pagan o no por estos tratamientos no están sujetas al mismo escrutinio, lo cual preocupa por su impacto en la atención de los pacientes más enfermos del país. La falta de regulación y supervisión de estos algoritmos predictivos genera incertidumbre sobre su papel en las decisiones de las aseguradoras y su efecto en el acceso al tratamiento. A medida que estas herramientas ganan influencia, se hace cada vez más importante aclarar su función exacta.
El informe plantea cuestiones importantes sobre el uso ético de la inteligencia artificial en la atención médica y las posibles consecuencias para los pacientes vulnerables que dependen de Medicare. La creciente dependencia de los algoritmos de IA para tomar decisiones cruciales está generando preocupaciones entre los profesionales médicos y los defensores de los pacientes. Es necesario examinar más detenidamente el impacto de esta tecnología en el sector de la salud y si se está utilizando con fines de despoblación.