Mohamed VI abrirá embajada en La Habana para limitar el apoyo de Cuba al Frente Polisario

El Rey Mohamed VI se propone reabrir la embajada de Marruecos en Cuba, en el marco de una estrategia que pasa neutralizar a medio plazo el apoyo del régimen cubano al Frente Polisario, el movimiento que desde hace cuarenta años lucha por la independencia del antiguo Sáhara español.

Marruecos estableció relaciones diplomáticas con Cuba en 1960 y la embajada marroquí funcionó hasta 1980, fecha en que Marruecos la cerró en protesta contra el reconocimiento por parte de Cuba de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) proclamada por el Frente Polisario.

Tras la reanudación de las relaciones de Estados Unidos con Cuba en diciembre pasado, el monarca alauí ha decidido emprender una ofensiva diplomática y económica de acercamiento al régimen cubano con la finalidad de conseguir que Raúl Castro reduzca la ayuda que La Habana viene prestando desde hace cuatro décadas al Polisario, limitándola al capítulo humanitario.

Mohamed VI ha sacado del cajón de la historia las excelentes relaciones que en su tiempo tejió el Sultán Mohamed V (su abuelo) y el Movimiento Nacional de Resistencia marroquí con la Cuba del dúo Guevara/Castro. Con este precedente se propone a medio plazo abrir después de 35 años la legación diplomática en la capital cubana.

El primer paso del deshielo de las relaciones entre Marruecos y Cuba ha sido la decisión del Rey de establecer un enlace entre Casablanca, capital económica del reino, y La Habana. Según la publicación francesa especializada “Mondafrique”, están en curso negociaciones entre las autoridades de ambos países para establecer vuelos directos de la compañía marroquí RAM.

En medios diplomáticos del Magreb se estima que, en una primera fase, la estrategia de Mohamed VI pasaría por cerrar acuerdos comerciales ventajosos para Cuba, sobre la base de exportar artículos de primera necesidad para la población de la isla. El objetivo final será, según las citadas fuentes, que Cuba limite la ayuda logística que presta a los miles de saharauis que viven en los campamentos de refugiados del Tinduf, en el Sáhara argelino.

El inesperado acercamiento de Marruecos a Cuba ha causado sorpresa en el Gobierno español que lo interpreta como una hábil jugada, que estaría reforzada por la reciente visita del Presidente François Hollande a La Habana para abrir el mercado cubano a las compañías francesas. Muchas de ellas con intereses en Marruecos.

Los principales tour-operadores galos, y las empresas hoteleras propietarias de resorts de lujo estudian entrar en el mercado turístico cubano, considerado como muy prometedor a corto y medio plazo. Se da la circunstancia de que las mismas compañías francesas que se interesan por el mercado cubano están presentes desde hace años en Marruecos: Accord, Sofitel, Club Med y Mercure, entre otras.