Cada uno de mis lectores alguna vez lo ha vivido, que simultáneamente se le mezclen los que para él son los mejores días de su vida con los opuestos, con los peores, cada uno los asume según su temperamento y temple.
Netanyahu está ahora en ésa simbiosis, en ésa dicotomía, los años en el poder no pasan en vano, no siempre se puede realimentar, reproducir las energías que se consumen, los estados de ánimos tampoco lo son, todo se desgasta aunque se realicen esfuerzos para intentar demostrar que todo continúa igual o mejor.
Al escribir éste comentario Netanyahu está en vuelo hacia los Estados Unidos para la entrevista política más importante de su vida, la que puede marcar un antes y un después, lo hace en uno de sus peores momentos personales, atacado por investigaciones policiales y judiciales que lo afectan incluyendo a su círculo más cercano, tan es así que los 3 canales de tv abiertos en su principal servicio noticioso de los viernes, 100% de audiencia, abrieron los mismos con esos temas, casi 15 minutos insumidos para analizar posibles consecuencias, cada uno en búsqueda de una nueva primicia que incorpore un poco más de sal y sabor al ya de por sí complicado panorama, son tantos los frentes abiertos que es casi imposible, presión mediática mediante, que pueda imaginarse que ninguna de ellas llevará a imputar penalmente al Primer Ministro, en tal circunstancia la pregunta del millón es, deberá o no dar un paso al costado.
Son las mismas preguntas que se hacen los más allegados al Presidente Trump antes de recibirlo en la Casa Blanca y es allí donde más le duele y afecta a Netanyahu, que su fuerza esté bajo un signo de interrogación, que su permanencia sea una incógnita. Mientras en Israel se habla de costosos vinos, champagne y cigarros recibidos como regalos por parte de diferentes multimillonarios, cuando su esposa Sara declara en sede policial que Bibi sobre ello nada sabía, que él llega y se sienta a cenar cuando el vino está sobre la mesa, que las cosas las compran con dinero en efectivo, el que estas líneas escribe, criado y educado en una cultura diferente, sudamericana, no puedo menos decir que tengo una sensación de vergüenza ajena, pero se parecen interrogatorios y respuestas que cualquiera de mis muchos amigos abogados penalistas conocen en sus defensas diarias.
A esta altura de su vida política a Netanyahu poco o nada le importa los que se diga o piense de él dentro de Israel, conoce que al día de hoy no tiene opositor ni nadie que se le acerque, que mayoritariamente la base de la sociedad lo apoya, que las investigaciones no afectan su prestigio, al contrario se ríen de ellas, que sus ataques contra la prensa por izquierdista y bolchevique, exactamente en la misma línea que Trump, en su mayoría son compartidas, lo único que sí le molesta, y mucho, son los comentarios y consultas de los líderes políticos internacionales, ése es su mundo, él ya está sobre todo y todos.
Mientras la derecha política lo apura a Netanyahu con exigencias de acciones inmediatas, nuevos asentamiento y extender la legislación israelí sobre dichos territorios, todo ello para capitalizar el viento a favor que parece ser llega desde Washington, en el encuentro todo indica que intentará mejorar y afianzar su imagen de estadista, presentarse como un socio ideal para los pensamientos del Presidente Trump.
Los últimos días Netanyahu se aisló para, en soledad, preparar al milímetro todas las posibles alternativas que se le podían presentar frente a Trump, llega a un diálogo abierto con éste en donde aún nadie conoce cuáles son sus lineamientos y pensamientos centrales, a Trump no le resulta fácil acostumbrarse a moverse dentro de la burocracia política, él viene del sector empresarial en donde nadie discutía sus palabras, por ello su impulsiva reacción ante el Juez Federal que le bloqueó momentáneamente su prohibición de visas e ingresos desde 7 países musulmanes, en su vida empresarial nunca nadie le dijo no, de repente ahora justamente cuando es Presidente del país más fuerte y poderoso del mundo se lo dicen, para él difícil de digerir.
Netanyahu llega al encuentro para fortificar las coincidencias, el tema Irán los une, el explicar didácticamente el peligro no solo para Israel sino, especialmente, para los Estados Unidos, sería un logro personal y político. Aunque ya hace tiempo que Netanyahu viene martillando los oídos sobre el peligro de Irán, sobre su expansión a Siria y por consiguiente su abastecimiento con el armamento más moderno a Hisballá, una bomba de tiempo para Israel, el ampliar el peligro hacia los Estados Unidos hace que el tema, el peligro, deje de ser exclusivo de Israel para ser de ambos.
Lograda dicha coincidencia todos los demás temas importantes para Israel pueden esperar mejores oportunidades, lo principal está logrado, no hay que presionar a Trump con su promesa de trasladar la embajada desde Tel Aviv a Jerusalén, tampoco presionarlo con el tema asentamientos, hay que darle tiempo, alcanza con que emitan comunicados en contra pero que paralelamente miren al costado y dejen hacer, seguramente las puertas quedarán abiertas para próximos encuentros de trabajo.
Pero no todo está en manos de Netanyahu, la casa propia políticamente arde, está en ebullición, el tema es hasta cuando los chispazos no producirán un incendio.
Antes de finalizar informamos a nuestro fieles lectores que desde hoy en forma paralela a éste Newsletter en Facebook se habilitó la página https://www.facebook.com/tiempodelsabor en la cual como parte de un proyecto mayor, a pedido y como un servicio a muchos de nuestros lectores que llegan a Israel como turistas, nombres de restaurantes con sus visitas y críticas, también recetas de comidas presentadas por renombrados e internacionales Chefs, la Cocina de Doña Frida será una de ellas.
Hasta la próxima
Dr Israel Rabinowicz
Israel
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