Los padres tienen que responder también de lo que hacen los menores o sus hijos en cuanto a delitos se refiere, a insultos, a vejaciones, a acosos, etc.
Los profesores tienen que responder por las actuaciones maliciosas de sus alumnos, si no, ¿de qué tipo de educadores estamos hablando?
Vamos a ver, ¿aquí quién educa? Porque si nos ponemos así... ¿quién se responsabiliza de estas acciones incoherentes de los chavales? ¿Quién paga entonces?
Los políticos y profesionales tienen que responsabilizarse de los hechos que realizan los jóvenes que están bajo su tutela.
Así como ellos, los jóvenes, tienen que responsabilizarse y pagar, y saber que lo han hecho mal.
El joven la paga y el padre también, ya que el padre es una autoridad y un educador, y no un colega o amigo del hijo.
Así que estaría bien de una vez poner las cosas en su sitio, dado que los jóvenes son el futuro pero unos jóvenes formados y con una vida correcta, y no unos salvajes que recuerdan al cromañón.
El vecino, el parado, el que no está parado, el periodista, el consumista y hasta el comunista están implicados en esta sociedad donde los padres son esclavos de los hijos.
Estas cosas nos incumben a todos, ya que ninguno de nosotros vive en Marte y todos hemos visto actitudes detestables en nuestro día a día.