El Corte Inglés ha ofrecido al Banco de China su patrimonio inmobiliario en una audaz operación para evitar que el jeque qatarí Al Thani se haga con el mando de la mayor cadena española de distribución, de la que ya controla el 10 por ciento del capital y un puesto en el consejo de administración que le permite influir en las decisiones del grupo. La enseña del triángulo verde busca en el gigante asiático, donde ya está presente desde el pasado octubre, liquidez para pagar la deuda a los bancos y dar un giro a un modelo de negocio que no remonta el vuelo. La opción china coincide con la oferta del controvertido millonario mexicano Carlos Slim de comprar el grupo, rechazada por el presidente Dimas Gimeno.La mayor cadena española de distribución no ha sabido dar respuesta al cambio radical experimentado por el consumidor ante la proliferación de franquicias y centros comerciales por toda la geografía nacional. La crisis de un modelo de negocio que se ha quedado obsoleto y se aleja de los beneficios de décadas pasadas, ha obligado a El Corte Inglés (ECI) a buscar liquidez en el gigante asiático y ha ofrecido al Banco de China 200 inmuebles, cuyo valor antes de que estallase la burbuja inmobiliaria superaba los 18.000 millones de euros.
El Corte Inglés ha ofrecido al Banco de China la compra de 200 inmuebles para hacer frente a la deuda con los bancos
No es la primera vez que ECI vende parte de su patrimonio para hacer caja y refinanciar la deuda contraída con los bancos, que a finales de 2013 ascendía a 5.000 millones de euros. Hace un año vendió los emblemáticos centros madrileños de Puerta del Sol y Princesa, y otro en Barcelona al fondo de inversiones IBA Capital por cerca de 500 millones de euros bajo la fórmula “sale&leaseback”, consistente en vender un activo inmobiliario y quedarse como inquilino en régimen de alquiler. También se desprendió del establecimiento de la firma Sfera en la calle Preciados de Madrid, adquirido por el fondo IVG por cerca de 70 millones.
Patrimonio en ventaLa refinanciación de la deuda no se limita únicamente a la venta de los inmuebles, los bancos han pignorado (tomado como garantía) varios activos del grupo por valor de 400 millones de euros. Cualquier fórmula es buena para que el enorme patrimonio inmobiliario acumulado con tanto esfuerzo por el fallecido Isidoro Álvarez se venda por debajo de su valor para afrontar los pagos a las entidades crediticias.
El grupo dirigido por Dimas Gimeno quiere evitar que el jeque qatarí se haga con el control de El Corte Inglés
Ante esta delicada situación, ECI ha acudido al Banco de China con una doble intención: En primer lugar, evitar que el multimillonario jeque qatarí Hamad Bin Jassim Bin Jaber Al Thani adquiera más poder en caso de que se ofreciera a comprar el patrimonio inmobiliario. En segundo lugar, la entidad financiera nada en la abundancia y ECI ya está presente en China, lo que constituye una garantía para el banco chino. En medios empresariales madrileños se apunta que el presidente Dimas Gimeno quiere convertir a China en “socio estratégico” para frenar la draconiana presión de Qatar, emirato que apoya al terrorista Estado Islámico.
Tiendas en ShangháiEn efecto, desde el pasado octubre El Corte Inglés, a través de la empresa OU-Jue Internacional en calidad de socio local, ha emprendido un ambicioso proyecto de comercialización de productos alimenticios españoles en grandes superficies, supermercados, tiendas a pie de calle y hoteles. Los dos primeros establecimientos se abrieron en Shanghái, el primero en el Dongjiao State Guest Hotel y el segundo en los Almacenes Bailian ubicados en el recinto de la Expo de Shanghái. A finales de 2016 se habrán abierto una veintena de puntos de venta.
ECI está presente desde octubre en el gigantesco mercado chino con productos alimenticios “Made in Spain”
Con la entrada en el mercado chino ECI accede a 1.370 millones de potenciales clientes y abre las puertas a su internacionalización, puesto que su presencia exterior hasta ahora se limitaba a Portugal. El gigante asiático se ofrece como un salvavidas para el grupo, tanto por la inyección de liquidez del Banco de China como por los ingresos que generará la venta de productos alimenticios “Made in Spain” así como otras líneas de negocio, entre ellas la moda a través de las marcas propias.
Qatar y el Estado IslámicoEl dinero chino permitirá refinanciar la deuda con la banca española y devolver los 1.000 millones de euros (10% del capital) prestados por el jeque Al Thani. En medios empresariales y políticos no se vio con buenos ojos la entrada hace un año del capital qatarí en una empresa tan emblemática y hasta el momento cien por cien española como El Corte Inglés. La aparición del jeque y su fondo de inversiones coincidió con las denuncias de los medios de comunicación internacionales sobre la financiación del Estado Islámico por parte jeques qataríes y príncipes saudíes.
El autoproclamado Estado Islámico aterroriza a Europa con una oleada de sangrientos atentados que, hasta el momento, han llevado la muerte a París y Bruselas. La organización yihadista a través de comunicados y videos no pierde ocasión de señalar a Al-Andalus, España, como uno de sus objetivos prioritarios.
El controvertido empresario mexicano Carlos Slim asumía la deuda, pero quería hacerse con el control absoluto
La iniciativa de convertir a China en el “socio estratégico” de referencia se ha gestado en paralelo con una oferta del megamillonario mexicano, Carlos Slim, uno de los cuatro hombres más ricos del mundo, amigo del expresidente Felipe González. El controvertido empresario impuso como condición para asumir la deuda de El Corte Inglés y reflotarlo, hacerse con el control absoluto del grupo. Extremo que no fue aceptado por Dimas Gimeno; una decisión que no habría sentado nada bien en determinados ambientes, que han desatado una campaña para apartarle de la presidencia.
Campaña contra Dimas GimenoCampaña que tiene su principal frente en los tribunales. Las hijas adoptivas de Isidoro Álvarez, las hermanas Cristina y Marta Álvarez Guil, quieren todo el poder, apoyadas por el poderoso Jefe de Seguridad, Juan Carlos Fernández Cernuda,que presume de tener amistades en el estamento judicial.
Se da la circunstancia de que uno de los jueces que suele ser invitado a la Fundación Ramón Areces, Andrés Sánchez Magro, se hizo con la demanda judicial de Carlota Areces, representante de Ceslar tras ser expulsada del consejo de administración cuando se opuso a la entrada del representante de Qatar. Las relaciones de amistad del mencionado juez con Juan Moral, el ex fiscal director jurídico de ECI, han llevado a los Areces a recusar al mencionado juez.