Señala que tanto ella como Adolfo Suárez han solicitado la convocatoria urgente de la Mesa del Congreso.
Por otro lado, subraya que ha de ser la Mesa la que debe tomar decisiones y que, pese a haber solicitado su convocatoria, “se nos obvió, no se nos permitió que ejerciéramos el papel que nos corresponde como órgano de gobierno de la Cámara” y defender así los derechos de un diputado.
“La Mesa, y soy miembro de ella, no ha tenido la oportunidad de manifestarse”, lamenta la dirigente popular, quien señala que la decisión de que el diputado pueda votar presencialmente no corresponde a la presidencia.
Remarca que “en ningún momento se han derogado los derechos que tienen los diputados” como consecuencia de la pandemia y explica que esta cuestión está regulada tanto en el reglamento de la Cámara como en una resolución de 21 de mayo de 2012.
Denuncia que la Mesa no se haya reunido tras haberse dirigido un diputado a los servicios de la Cámara para que se anulara su voto al entender que no se correspondía con lo emitido y votar presencialmente.
Pastor, destaca que el GPP ha presentado un escrito en el que solicita a la presidencia que no se publique la votación efectuada en el Pleno de ayer.
“El prestigio que tiene que tener una institución como es el Parlamento está por encima de todo. Hay que actuar conforme a las normas que nos hemos dado los españoles y preservar la institucionalidad para que los ciudadanos puedan mirar al Congreso y decir que se sienten orgullosos de él”, concluye.