La sorprendente visita del Patriarca Kirill a la Antártida tras la histórica reunión con el Papa Francisco en La Habana, para rezar en la única iglesia ortodoxa rusa en el continente helado, ha desatado las especulaciones en las redes sociales rusas sobre el verdadero motivo del viaje del líder religioso. Aseguran que Kirill realizó un antiguo ritual ante la misteriosa “Arca de Gabriel” descubierta en septiembre del pasado año en un túnel durante las obras de la Gran Mezquita de La Meca y trasladada en secreto hasta uno de los lugares más alejados del planeta. Según la tradición musulmana el arca contiene instrucciones del arcángel Gabriel o “emisario de Dios” al profeta Mahoma.
La agencia de prensa rusa Ria Novosti desveló la pasada semana que el Patriarca de la Iglesia ortodoxa, Kirill I, había viajado a la Antártida el 18 de febrero para rezar por el planeta en la única iglesia ortodoxa rusa del continente helado y visitar una colonia de pingüinos. Tan débil y poco creíble argumento ha desatado las especulaciones en las redes sociales rusas sobre el objetivo real del sorprendente viaje.
La supuesta “Arca de Gabriel” fue descubierta, siempre según los rumores que circularon en esas fechas, el 12 de septiembre de 2015 en un túnel durante las obras de rehabilitación de la mezquita de Masjid al-Haram, la más importante de la ciudad de La Meca y primer lugar santo del islam. El misterioso objeto habría sido embarcado semanas después en el puerto saudí de Jedda a bordo del buque de investigación ruso “Almirante Vladimisky”, que fue escoltado por navíos de guerra hasta llegar a una base en la Antártida.
Arma de plasma
En medios de inteligencia árabes no se descartó que el “Arca de Gabriel” fuese una operación psicológica de la inteligencia saudí, que habría filtrado en las redes sociales la pretendida ayuda científica rusa con el fin de rebajar la tensión entre las dos naciones a causa del apoyo de Arabia Saudí al Estado Islámico, responsable del atentado contra el Airbus A321 en la península del Sinaí en el que murieron 224 ciudadanos rusos.
La tradición musulmana recoge que el “Arca de Gabriel” contiene instrucciones dadas al profeta Mahoma por Gabriel -nombre que en hebreo significa la “fuerza de Dios” o el “poder de Dios”-, uno de los tres arcángeles o mensajeros de Dios que reconocen las religiones cristiana, musulmana y judía. La caja o arca tenía tanto poder -similar al del “Arca de la Alianza” de la Biblia- que solo podía ser manipulada por Gabriel.
Permanecer enterrada
El arca debe de permanecer enterrada, según la citada tradición, hasta el día del Al-Qiyamah o de la Resurrección, también llamado Día del Juicio Final. Se da la circunstanciade que la Iglesia Ortodoxa rusa custodia uno de los manuscritos más antiguos del Islam, titulado “Instrucciones de Gabriel a Mahoma”, que se salvó de ser destruido durante el saqueo de la Iglesia de Santa Sofía de Estambul por los cruzados en 1204.
Las redes sociales rusas se encuentran divididas a la hora de pronunciarse sobre si el texto presuntamente leído por el Patriarca Kirill ante el “Arca de Gabriel” es el que custodiaba la Iglesia Ortodoxa o, por el contrario, es un texto facilitado por el Papa Francisco que el Vaticano guarda desde hace siglos.