“Las medallas hay que dárselas a los que frenaron el golpe del 6 y 7 de septiembre y no a los que lo dieron”. Así lo ha dicho la presidenta de Ciudadanos (Cs), Inés Arrimadas, en una atención a los medios delante del Parlament de Catalunya donde este viernes la presidenta de la institución catalana, Laura Borràs, entrega la Medalla de Honor “a los que han utilizado la violencia para imponer sus ideas”.
Arrimadas ha recordado que la presidenta del Parlament, “pluri-imputada por trocear contratos”, ha insultado a la diputada naranja, Anna Grau, participando en una “ataque machista” por su vestimenta en las redes sociales.
La presidenta de Cs ha defendido una “oposición firme y constructiva” porque “allí donde gobernamos, hay prosperidad, estabilidad e inversiones que es lo que no hay en Cataluña”.
En este sentido, ha lamentado la pérdida de “una inversión de casi 2.000 millones de euros” que supone la ampliación del aeropuerto del Prat porque “el Govern no quiere infraestructuras, ni oportunidades para los catalanes, solo quieren privilegios para los líderes separatistas y quieren indultos”.
Por su parte, el líder de Cs en Cataluña, Carlos Carrizosa, ha denunciado el “secuestro” del Parlament por parte del nacionalismo y que se otorgue “una medalla de honor a los que vulneraron la democracia y a los que alteraron el orden público”.
Carrizosa ha criticado que, precisamente la presidenta, Laura Borràs, asista junto al expresidente de la Generalitat, Quim Torra, quien fue “destituido por falta de respeto a las leyes”, a un homenaje al “viejo nacionalista de ERC, Heribert Barrera” asegurando que “los grandes referentes del nacionalismo son a quien se homenajea”.