De cara a la celebración del próximo 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres, el Gobierno ha querido lanzar un mensaje contundente de “apoyo firme al movimiento feminista y a sus demandas”, con la aprobación de una declaración institucional que recoge el “compromiso” del Ejecutivo “para convertir esas reivindicaciones en políticas útiles para el conjunto de la sociedad, de manera que el reto de transformación social y económica que tenemos por delante no pierda de vista esta mirada de género” y en favor de la igualdad.
En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros, la portavoz del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha señalado asimismo que, este 8 de marzo, “hay que celebrar y reivindicar el feminismo con voz alta y clara, pero tenemos que hacerlo sin poner en riesgo ni en duda la seguridad o la salud de nuestros compatriotas”.
Debe ser así –continuó- “mientras que no tengamos la suficiente inmunización colectiva”, pues “no podemos dejar ningún resquicio al virus para que se propague”. “Es muy importante que la ciudadanía entienda que aún no es el momento de relajaciones, de concentraciones masivas, ni de manifestaciones que no guarden las debidas distancias y normas de seguridad”, remarcó.
Montero ha recordado que si bien “hace un año el 8M fue señalado de forma injusta por algunas formaciones políticas de manera interesada como origen de la pandemia en España”, lo cierto es que “por esas fechas se celebraban partidos de fútbol, concentraciones de personas, conciertos e incluso mítines”.
“Este año, siguiendo las recomendaciones de los expertos, la celebración será distinta pero no por ello menos reivindicativa”, conscientes como somos “del largo camino que todavía queda por delante para conquistar la igualdad real y efectiva entre hombres y mujeres”. Y más aún en estos tiempos de pandemia en los que “es en las mujeres donde se concentran los mayores sufrimientos, las mayores brechas salariales o abandonos de puestos de trabajo”, ha dicho Montero.
Además de referirse –entre otras- a las desigualdades que sufren las mujeres en el mundo laboral que se traducen en peores salarios, mayor precariedad o pensiones más bajas, se ha detenido en la preocupación del Gobierno respecto a la violencia que se ejerce sobre las mujeres por el simple hecho de serlo, y que se traduce en que 1.081 mujeres hayan sido asesinadas a manos de sus parejas o exparejas desde 2003. “Hoy mismo tenemos que lamentar la muerte de otra mujer en Torrejón de Ardoz, presuntamente a manos de su expareja” ha señalado Montero, quien destacó que son ya cuatro las asesinadas en este año, “lo que vuelve a ser una señal de alarma”.
Seguir cumpliendo con las recomendaciones sanitarias
En cuanto a la situación de la pandemia, la portavoz destacó que esta semana tanto los contagios como la incidencia acumulada siguen bajando, lo que “no significa que podamos relajarnos” y sea preciso “seguir cumpliendo con las recomendaciones sanitarias”, pues solo así seremos capaces de frenar el virus.
Entendiendo “el cansancio y el hartazgo en la población”, Montero ha animado a persistir en las precauciones, teniendo en cuenta que contamos con una esperanza cierta como son las vacunas. En ese sentido, ha recordado que “somos uno de los países más avanzados en vacunación” y que “hemos conseguido que en nuestro país haya ya más personas vacunadas con la primera dosis que contagiadas”.
Informó igualmente de la compra adicional de vacunas a la farmacéutica Moderna que ha realizado la Unión Europea y de las que nos corresponden 17 millones, que se entregarán en la segunda mitad del año. Concretamente, se trata de 5’7 millones de vacunas contra el Covid que recibiremos en el tercer trimestre del año, y 11’3 millones en el cuarto, “lo que va a permitir –dijo Montero- que las comunidades autónomas sigan cumpliendo con su calendario”. El objetivo sigue siendo que el 70% de la población española está vacunada a lo largo del verano.