La portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, considera que estas cuentas presentan más gasto, más déficit, más deuda y más desempleo por lo que acabarán con “la ruina económica y social que terminaremos pagando todos los españoles”.
“Estos no son los PGE que necesita España, van en el camino opuesto”
Por otro lado, ha criticado la ausencia de un Plan de Reequilibrio Fiscal para la recuperación y la sostenibilidad de las cuentas públicas, como obliga la Ley Orgánica, y apunta a un “calendario parlamentario perverso”, con un total de 114 comparecencias solicitadas en apenas 3 días.
También denuncia que Sánchez e Iglesias ignoran al Parlamento y apuestan por el rodillo, sin unos PGE que primen el talento y la inversión necesarios para España, el gasto público moderado y eficiente o la digitalización. Explica además que las palabras de Irene Montero a Teresa Rodríguez son “un paso atrás en la conquista de los derechos de la mujer” y que nunca antes una ministra de Igualdad hizo tanto daño a las mujeres: “No se trata de decir soy feminista, sino de avanzar en los derechos de las mujeres”.
La vicesecretaria de Sectorial del PP, Elvira Rodríguez, lamenta que estos presupuestos suponen “una oportunidad perdida” que no tiene en cuenta la extensión de la pandemia y hace un cálculo del impacto de los fondos europeos del 2%, muy por encima de otras instituciones como el Banco de España o el BBVA. “Son unos presupuestos ideológicos y no sirven para crecer y crear empleo”, añade.
Destaca que el alargamiento del estado de alarma hasta mayo “nos resta credibilidad dentro y fuera de España cuando se están cerrando los grandes contratos de los touroperadores turísticos para el verano”, y revela que las cuentas presentan una recaudación “dudosa” que se caen por el lado de los ingresos. “Va a haber más déficit y deuda, con un endeudamiento muy fuerte sustentado en las compras del BCE. Sin generar empleo y crecimiento no podremos pagar”, adelanta.
Rodríguez ha puesto en valor que las cifras sobre el PIB del INE hay que “cogerlas con pinzas” porque, aunque haya un “rebote potente”, refleja el trimestre con los datos estadísticos recolectados de los meses de julio y agosto y con algunos indicadores adelantados de septiembre, que es cuando se frena la actividad de manera brusca.
“Estos datos reflejan las compras embalsadas del consumo privado que es el que impulsa el crecimiento, pero se frena a partir de ahí. El próximo trimestre puede haber una fuerte corrección. La gestión de la pandemia no ayuda en nada y menos si el menaje es extender el estado de alarma hasta el mes de mayo”, lamenta.
El portavoz adjunto del PP en el Congreso, Mario Garcés, asegura por su parte que hay una subida impositiva fuerte con “un factor ideológico dominante”. “Cuando hay una fiscalidad ideológica quienes pierden son los ciudadanos”, enfatiza, añadiendo que no se van a subir los impuestos a los ricos, se van a subir los impuestos a las clases medias y bajas.
Ha adelantado que apoyarán la retirada de la subida de los impuestos del diésel y explica que las empresas necesitan confianza y certidumbre, a la par que advierte que “una subida fiscal se compadece muy mal con las 100.000 empresas cerradas, los 700.000 empleos destruidos, las 700.000 personas en ERTE y ese millón de pymes y autónomos que se encuentran al borde la desaparición junto con el conjunto de pre concursos solicitados en sede judicial”.