Ya han sido dos las veces que la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha dejado en la estacada al general de brigada Antonio Esteban López. ¿Qué está pasando en el Ejército de Tierra? ¿Hasta dónde llegan los vetos impuestos desde las más altas esferas del Gobierno?
Pese a que se esperaba que Esteban ascendiese a general de división y terminase al frente de la Escuela Superior de las Fuerzas Armadas, esto no sucedió.
El primer 'no' tuvo lugar en febrero, cuando las malas lenguas apuntan a una tensa reunión entre el jefe de Tierra y Robles. Tras un segundo intento, Defensa se apresuró a dar el puesto al general Miguel Ballenilla, secretario general del Mando de Adiestramiento y Doctrina hasta entonces.
La cosa no quedó ahí, y es que Esteban, por su parte, fue destinado a la Secretaría General del Mando de Adiestramiento y Doctrina de Tierra (MADOC), en Granada.
Este destierro llamó la atención de Vox, que no dudó en preguntar a la ministra por ello, respondiendo que "cuenta con una excelente formación militar y académica y de una gran experiencia profesional que le facultan para desempeñar con garantía los cometidos de muchos destinos de la plantilla de las Fuerzas Armadas", aunque "el perfil personal y profesional" de Ballenilla era "más idóneo para ocupar dicho puesto".
El general, harto de este veto y ante la situación, que podría estar vinculada a un caso del CNI en el que se vio salpicado, se ha llegado a plantear recurrir ante la Justicia por la vía contencioso-administrativa, e incluso penal.