Ana Obregón y Alessandro Lequio han permanecido junto a su hijo en la Ciudad Condal hasta sus últimos momentos. Habían alquilado incluso un aparamento en Barcelona, donde Álex Lequio ha vivido unas semanas muy complicadas debido a su delicado estado de salud.
La agonía comenzó hace poco más de un año, cuando la conocida actriz dejaba a un lado todo para dedicarse en cuerpo y alma a su hijo. Un periplo que les llevó incluso hasta Estados Unidos con el fin de encontrar el mejor tratamiento para Álex.
Lo que parecía un "tirón de espalda", según comentó en primera persona, se convirtió en una ardua lucha que llevó a cabo durante siete meses en el prestigioso Memorial Sloan Kettering Cancer Center de Nueva York.
Hacía ya año y medio de su regresó a España, donde Álex continuó el tratamiento hasta el mes de marzo del pasado año, cuando Ana Obregón anunciaba aliviada que "la pesadilla" había terminado.
"No para de trabajar, hasta en los hospitales está con el ordenador dale que te pego", comentaba su madre a la revista 'Semana' hace unos días, mostrándose orgullosa de su hijo.
Pese a esto, el pasado mes de diciembre, así como en febrero, Álex tuvo que ser ingresado de nuevo, aunque su padre señalaba a la prensa que "él está muy esperanzado y nosotros esperanzados también. Esto es largo y duro y no se puede decir más. Él está optimista y muy esperanzado".
Un desenlace fatal que nadie esperaba y que, como cabía esperar, ha dejado destrozados tanto a Ana Obregón como a Alessandro Lequio, que han evitado hacer declaraciones en estos durísimos momentos.