Los datos reportados en los últimos días por las autoridades sanitarias de España han dejado un descenso realmente acusado de los nuevos contagios en la Comunidad de Madrid que han hecho albergar esperanzas en los ciudadanos, que aspiran a que las medidas de confinamiento y otras restricciones queden atrás lo más pronto posible.
Pero lo cierto es que esos datos no se corresponden con la realidad de la situación de la epidemia de la región, que incluye a la capital del país, puesto que la manera de registrar los nuevos casos por el gobierno regional hace que la cifra reportada diariamente sea mucho menor al aumento de los casos que se detectan.
Lo cierto es que las cifras anunciadas diariamente por el Ministerio de Sanidad con respecto a la región madrileña a simple vista no cuadran. Así, mientras que el pasado 1 de mayo se informaba de que había 52 nuevos contagios en la Comunidad de Madrid, el dato total de casos confirmados aumentaba en 658 con respecto a la jornada anterior.
Desde ese día se ha producido ese desajuste en los datos facilitados. El más sorprendente llegó el día 4 de mayo, cuando se anunció que este territorio solo había registrado un caso nuevo, mientras que el aumento del número total era de 190.
Desde el 1 de mayo hasta este miércoles la información diaria ha reflejado entre el 27 % (hoy) y el 0,52 % (este lunes) del incremento diario de los casos registrados cada jornada.
En total, en esos seis días, el cómputo total de contagios ha aumentado en 2.245 positivos confirmados por PCR, mientras que la suma de los casos reportados diariamente solo llega a 356 (un 15 %).
Las cifras difieren debido a que desde el 1 de mayo la Comunidad de Madrid asigna los nuevos contagios que detecta a la fecha en la que se tomó la muestra o se emitió el resultado, según ha avisado el departamento de Sanidad. Es decir, agregan los datos a días anteriores, sumándolos al total, lo que repercute en que diariamente se notifica un número mucho más reducido de nuevos casos.
Lo cierto es que hasta el 30 de abril no había variación entre el incremento de casos diarios y los nuevos casos reportados, sino que fue con el cambio de mes cuando las autoridades madrileñas comenzaron a realizar un tipo de recuento diferente.
El cambio de criterio de la Comunidad de Madrid a la hora de clasificar las cifras y remitirlas al Ministerio de Sanidad se ha realizado en la misma semana en la que el Gobierno de España ha anunciado el calendario para la desescalada de las medidas restrictivas, que se pusieron en marcha el 14 de marzo para frenar la expansión de la pandemia en el país.
Así, el presidente Pedro Sánchez anunció que se llevaría a cabo en cuatro fases diferenciadas, en las que paulatinamente se irían levantando las limitaciones, y que los diferentes territorios avanzarían a cada una de ellas a distinto ritmo dependiendo de la evolución de la enfermedad en cada región y de sus capacidades sanitarias, entre otros parámetros.
De este modo, se especula con que el nuevo recuento esté dirigido a minimizar la percepción de la importancia de la epidemia en la región con el fin de poder acceder a la siguiente fase de la desescalada junto al primer grupo de territorios que lo haga.
En este sentido se ha manifestado en los últimos días la presidenta madrileña, la conservadora Isabel Díaz Ayuso, que aboga, como el resto de su formación (Partido Popular) por permitir todas las actividades económicas e incluso por que los alumnos de todos los niveles docentes vuelvan a las aulas antes de que concluya el curso escolar.
Las buenas cifras publicitadas, como el único contagio del día 4 de mayo, están ayudando a que parte de la opinión pública apoye la tesis de que lo peor de la crisis sanitaria ya ha pasado y sea proclive a la reactivación económica total para paliar los efectos que la pandemia está teniendo, sobre todo, en el ámbito del empleo.
El gobierno ofrece los datos que cada día recibe de cada Comunidad Autónoma de las personas a las que se diagnostica covid-19 tras hacerles una prueba PCR. Son los llamados casos confirmados.
La mayoría de ellos son pacientes que están o han estado hospitalizados, pues en estos centros sanitarios se han realizado la mayoría de las pruebas, que desde hace alrededor de 15 días aumentaron de 20.000 a 40.000 a la semana en todo el país.
El Ministerio de Sanidad también facilita cada día la cifra de fallecidos, que es el dato más fiable de todos, aunque también ha resultado polémico por la forma en que se realiza su recuento. Las autoridades también ofrecen las muertes confirmadas mediante test PCR, por lo que aunque incluye algunos decesos ocurridos en residencias de la tercera edad a los que se les realizó la prueba (que han sido muy escasas), la mayoría se refieren a pacientes hospitalizados.
El recuento de las cifras ha provocado numerosas críticas, tanto en el caso de los contagios, como en el de los fallecimientos. Estos últimos fueron el centro de la polémica a nivel nacional cuando se constató que los fallecimientos en geriátricos, uno de los principales focos de la pandemia en España, en su mayoría no constaban en los registros oficiales, porque no se les estaba realizando la prueba para considerarlos casos confirmados.
En el caso de la Comunidad de Madrid, el total de las muertes desde que comenzó la epidemia es 8.466, según la información que comunica diariamente el departamento de Sanidad de España. Sin embargo, a ese dato habría que añadir los 5.828 fallecidos por covid-19, o sospechosos de haber sufrido la enfermedad, en residencias de mayores de la región desde el pasado 8 de marzo, según ha informado la Consejería de Políticas Sociales de la región.
Y no solo eso, sino que también habría que sumar 834 decesos en domicilios y 24 en otros lugares sin especificar, de los que también informa el organismo autonómico. Así, las muertes relacionadas con el nuevo coronavirus ascenderían en Madrid a 15.150, casi el doble de la cifra oficial.