Estas dos claves centraron la intervención del presidente desde la tribuna del Congreso de los Diputados, para solicitar una nueva prórroga de 14 días del estado de alarma que llegaría hasta el 23 de mayo (inclusive).
El presidente pidió “con serenidad y sin reproches” a los partidos de la oposición que “sumen su voto a la lucha contra la epidemia". "Les pido que no priven al Gobierno del arma jurídica imprescindible para completar la victoria frente al virus. Les pido que voten la renovación del estado de alarma”, rogó Sánchez.
"Necesitamos aún limitar unas semanas nuestros movimientos; necesitamos limitar todavía nuestros encuentros unas semanas. Eso es la desescalada. Y para hacerlo necesitamos el estado de alarma", resumió.
“En la gestión de esta pandemia no hay aciertos absolutos”, admitió el presidente porque “nadie acierta siempre en una situación tan inédita y tan extrema como esta, ni desde el Gobierno ni desde la oposición”.
“No hay, pues, aciertos absolutos; pero sí puede haber errores absolutos. Y levantar el estado de alarma ahora sería el gran error absoluto”, aseveró el presidente.
Además, Sánchez comenzó su intervención apuntando que “España ha comenzado su desescalada” pero “no hemos llegado hasta aquí porque nos hayan llevado las circunstancias; no hemos llegado hasta aquí porque el virus haya perdido capacidad de contagio”, sino por “el esfuerzo” de profesionales y el sacrificio de millones de españoles. “Suyo es todo el mérito de esta primera victoria contra la pandemia”, añadió.
"En la gestión de esta pandemia no hay aciertos absolutos, pero sí puede haber errores absolutos por parte de todos los que estamos aquí presentes. Y levantar el estado de alarma ahora sería un error absoluto, total, imperdonable", añadió más adelante durante la exposición de las medidas económicas y sociales impulsadas desde el Ejecutivo.
COGOBERNANZA
“La desescalada será asimétrica y será además cogobernada. La dirigiremos juntos, el Gobierno y los ejecutivos de las distintas comunidades autónomas, en gobernanza”, destacó el presidente en su intervención ante el Congreso de los Diputados para solicitar la autorización para prorrogar el estado de alarma.
Si bien, Sánchez también dejó claro que “lógicamente, las validaciones últimas dependerán del Ministerio de Sanidad, que lidera Salvador Illa, aunque el proceso establecido es adaptable y participativo".
Ante “lo más complejo”, que es lo que queda por delante, el presidente dijo que “las comunidades autónomas tendrán, además, capacidad interpretativa para desarrollar las órdenes que se dicten”.
“Dada la complejidad de la situación y la inmensa casuística que tiene cada uno de los territorios hace que sea imposible llegar al máximo detalle en las normas”, por lo que los gobiernos autonómicos “como administraciones más próximas, tendrán un papel protagonista en la desescalada” y de ahí el que se haya establecido “un procedimiento de cogobernanza que nos ayudará a ordenar el trabajo”.
UNIDAD
Una vez más el presidente abogó por unidad porque, subrayó, “no es momento de reproches” sino “el momento de tomar una decisión trascendental que nos marcará para siempre”. “Lo que hay que votar es si descendemos gradualmente o rompemos filas, si impera la unidad o si se impone el sálvese quien pueda” porque es “también una opción no sólo política sino también moral”.
Ahora que “la meta está cerca”, Sánchez exhortó a la oposición, “sin reproches”, a “perseverar unas pocas semanas más”. “Si lo hacemos dentro de unas semanas podremos celebrar juntos la primera victoria frente a la epidemia, aunque nos mantendremos vigilantes para evitar rebrotes”, aseveró.
El presidente repasó las medidas económicas y sociales puestas en marcha por el Gobierno y la “importancia de continuar” con el estado de alarma por las razones sanitarias, económicas y sociales”.
“Tenemos que dar lo mejor de nosotros mismos como dirigentes políticos: apoyarnos en el país que tenemos, lleno de talento y de capacidad de trabajo y de superación. Necesitamos apoyar un Pacto de Reconstrucción Social y Económica, trabajarlo unidos, de forma proactiva, confiando en que tenemos lo que necesitamos”, ensalzó Sánchez, incidiendo en que “España está esperando nuestra respuesta” y ya “está preparada para caminar”.
LUTO OFICIAL
Además, el presidente anunció que “en el momento en que la mayor parte de nuestro país esté en la fase 1 de la desescalada, el Gobierno declarará el luto oficial” que le reclamaba el Partido Popular en cada una de sus intervenciones.
En sus primeras palabras, Sánchez comentó que “tan pronto como las calles vuelvan a ser transitadas y los edificios oficiales visitados, el Gobierno declarará luto oficial”, lo que puede producirse a partir del próximo 11 de mayo, una vez que España comience a transitar por la primera fase de la desescalada proyectada por el Ejecutivo.
Del mismo modo, Sánchez trasladó que “en cuanto la integridad del país culmine la desescalada, acceda a la nueva normalidad y se den las condiciones de salud pública, se celebrará un homenaje público a las víctimas de la epidemia en el que el Gobierno trabaja desde hace semanas” y que así “se lo he transmitido” al rey Felipe VI.