El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, afirmó que la conversión de Canadá en el estado 51 de EE.UU. es una "posibilidad real". Durante una entrevista, Rubio citó al primer ministro canadiense, Justin Trudeau, quien advirtió que si se igualan las relaciones comerciales entre ambos países, Canadá podría dejar de existir como nación. Rubio sugirió que si Canadá no puede sostenerse sin prácticas desleales en el comercio, debería considerar convertirse en un estado estadounidense. La ministra de Exteriores canadiense, Mélanie Joly, también destacó que los aranceles propuestos por Trump representarían una "amenaza existencial" para Canadá. Para más detalles, visita el enlace.
El secretario de Estado, Marco Rubio, ha declarado que la transformación de Canadá en el estado 51 de Estados Unidos es una “posibilidad real”. Esta afirmación fue realizada durante una entrevista con la periodista canadiense Catherine Herridge, donde se abordaron las intenciones del expresidente Donald Trump respecto a la relación comercial entre ambos países.
Rubio citó las palabras del primer ministro canadiense, Justin Trudeau, quien expresó: “Si igualan nuestra relación comercial, entonces dejaremos de existir como país”. Este comentario surgió en el contexto de una reunión entre Trudeau y Trump, donde se discutieron aspectos cruciales sobre el comercio bilateral.
En respuesta a las preocupaciones planteadas por Trudeau, Rubio mencionó que Trump sugirió que si Canadá no puede sobrevivir sin recurrir a prácticas desleales en el comercio, “deberían convertirse en un estado” estadounidense. Estas declaraciones han generado un amplio debate sobre la viabilidad de la economía canadiense en el marco actual de relaciones comerciales.
Rubio también reflexionó sobre cómo las dinámicas comerciales han cambiado desde la Guerra Fría. En aquel entonces, Estados Unidos temía que los problemas económicos de sus socios pudieran dar lugar a un “golpe marxista interno”. Sin embargo, según él, esa época ha quedado atrás. “Esos días ya pasaron. Son economías desarrolladas y ricas”, afirmó Rubio. “Los días en que permitíamos que los países se aprovecharan de nosotros tienen que acabar”, añadió con firmeza.
Por su parte, la ministra de Exteriores canadiense, Mélanie Joly, advirtió previamente que las economías de ambos países están “extremadamente integradas”. Ella señaló que los aranceles anunciados por Trump representarían una “amenaza existencial” para Canadá si se implementan. La situación actual plantea interrogantes sobre el futuro económico del país norteamericano y su posición dentro del contexto internacional.
A medida que se desarrollan estos acontecimientos, tanto Canadá como Estados Unidos enfrentan desafíos significativos en sus relaciones comerciales y políticas. La atención ahora se centra en cómo responderán ambos gobiernos ante estas inquietudes y qué medidas tomarán para asegurar la estabilidad económica en la región.