Jordi Hereu, ministro de Industria y Turismo, visitó Manresa para evaluar las actuaciones del proyecto de rehabilitación del Camino Ignaciano, que cuenta con un presupuesto de 2,7 millones de euros. Durante su visita al Santuario de la Cueva de San Ignacio, destacó la importancia de este proyecto para la recuperación del patrimonio histórico y su potencial turístico. Las mejoras incluyen la restauración del antiguo Colegio de San Ignacio y el embellecimiento de varios espacios relacionados con el camino que recorrió San Ignacio de Loyola en 1522. Este esfuerzo busca diversificar la oferta turística y promover un modelo sostenible en el sector. Para más detalles, visita el enlace.
El ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, realizó una visita a la ciudad de Manresa con el propósito de evaluar las acciones implementadas en el marco del proyecto denominado «Recuperación del patrimonio histórico para uso turístico en el Camino Ignaciano». Este proyecto cuenta con un financiamiento de 2,7 millones de euros, provenientes del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Acompañado por la Secretaria de Estado de Turismo, Rosario Sánchez, Hereu visitó el Santuario de la Cueva de San Ignacio y la Capella del Rapte, dos importantes recursos turísticos que destacan en la oferta del Camino Ignaciano y en la figura del santo.
El ministro destacó que «el apoyo del Gobierno al proyecto del Camino Ignaciano de Manresa es un ejemplo claro de la búsqueda continua de nuevos productos y destinos turísticos para diversificar la oferta». Además, enfatizó que se trabaja en un modelo de sostenibilidad turística que abarque aspectos sociales, económicos y medioambientales, contribuyendo así a un reparto más equitativo de los beneficios generados por el turismo en todo el territorio nacional. «El turismo tendrá futuro si es capaz de distribuir esos beneficios», concluyó.
Las actuaciones realizadas incluyen mejoras en diversos espacios y elementos arquitectónicos relacionados con el Camino Ignaciano. Entre las principales acciones se encuentran:
El Camino Ignaciano rememora el recorrido realizado por San Ignacio de Loyola en 1522, desde su lugar natal en Azpeitia hasta Manresa, donde permaneció durante once meses. Este camino permite disfrutar una diversidad paisajística que abarca cinco comunidades autónomas: Euskadi, La Rioja, Navarra, Aragón y Catalunya.
Manresa forma parte de las 60 ciudades integradas en la Asociación de Municipios Camino Ignaciano, creada recientemente con el objetivo principal de resaltar el valor cultural, histórico y ambiental que ofrecen los distintos parajes a lo largo del camino.
El ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, visitó Manresa.
El proyecto está dotado con 2,7 millones de euros.
Se han realizado mejoras en diferentes espacios y elementos arquitectónicos, incluyendo la restauración del centro de acogida de peregrinos y la mejora de itinerarios.
El Camino Ignaciano recorre el peregrinaje que hizo San Ignacio de Loyola en 1522 desde su tierra natal hasta Manresa, permitiendo disfrutar de la diversidad de paisajes de cinco comunidades autónomas.
Manresa es una de las 60 ciudades que forman parte de esta asociación.