La ministra de Asuntos Exteriores de Georgia, Maka Bochorishvili, ha denunciado la injerencia de Estonia en los asuntos internos de su país. Esta acusación surge tras declaraciones del canciller estonio, Margus Tsahkna, quien calificó al Gobierno georgiano de ilegítimo y pidió nuevas elecciones. Bochorishvili afirmó que estas afirmaciones socavan la imagen internacional de Georgia y son contrarias a las relaciones amistosas entre ambos países. La situación se agrava con protestas en Georgia por parte de la oposición prooccidental, que cuestiona los resultados de las recientes elecciones parlamentarias. Para más información, visita el enlace.
La ministra de Asuntos Exteriores de Georgia, Maka Bochorishvili, ha manifestado su rechazo a las recientes declaraciones del canciller estonio, Margus Tsahkna, quien calificó al Gobierno georgiano como ilegítimo y exigió la convocatoria de nuevas elecciones. Este pronunciamiento ha sido interpretado por Bochorishvili como una clara injerencia en los asuntos internos de su nación.
En respuesta a las afirmaciones de Tsahkna, la ministra georgiana subrayó que existen pruebas concretas sobre el papel de Estados Unidos en lo que ella denomina "procesos de revolución" en Georgia. Tsahkna había declarado que el Gobierno actual carece de legitimidad democrática, sugiriendo que si la situación persiste, Georgia no podrá unirse a la Unión Europea.
Bochorishvili denunció que tales comentarios son una injerencia directa y tienen como objetivo socavar la imagen internacional de Georgia. Afirmó que estas declaraciones provienen de amigos bálticos y son contrarias a las relaciones amistosas que deberían existir entre ambos países, basadas en normas y estándares internacionales.